POR JOSÉ MANUEL TROYANO VIEDMA. CRONISTA OFICIAL DE BEDMAR (JAÉN).
Con motivo de cumplirse el 200 aniversario de la Fundación de la Hermandad de Penitencia del Santísimo Cristo flagelado en la columna “el Amarrao” de Bedmar (19/III/1821-19/III/2021), yo José Manuel Troyano Viedma, como Cronista Oficial de las villas de Bedmar y de Garciez (Jaén) y Doctor en Historia Moderna y Contemporánea de España y de América por la Universidad de Córdoba y Catedrático de Enseñanza Media jubilado, he realizado un libro a petición de la refundada Cofradía.
Éste lleva un prólogo de Felisa y Antonio Suárez Chamorro, grandes devotos de esta imagen en el la II Refundación de la Cofradía, sus abuelos costearon la imagen que en la actualidad se procesiona, quienes aseguraron “Muchas gracias, admirado José Manuel, por este trabajo exhaustivo, impecable y minucioso. Te estamos agradecidos, no sólo la familia Suárez-Chamorro, sino todo nuestro pueblo de Bedmar, pues prácticamente todas las familias bedmarenses están reflejadas en sus antepasados y en los que actualmente trabajan por la profundización de la devoción de Cristo Flagelado, “El Amarrao”.
En este trabajo se ven reflejados no sólo el nacimiento, sino todos los avatares de la Cofradía, desde su fundación. Como el Ave Fénix, que renace de sus propias cenizas, la
Cofradía tuvo declives y renacimientos durante su larga historia de dos siglos: Desde el año 1937 al 1939 la Cofradía casi desaparece. No tuvo lugar la procesión de penitencia. Sin embargo, consta que su devoción siguió conservándose en muchas familias de nuestro municipio de Bedmar.
Renacería en los años 40. Otro decaimiento tuvo lugar en la diáspora de muchos vecinos de Bedmar que tuvieron que emigrar buscando trabajo en otras tierras, u orientación profesional y estudios para los hijos (Azagra, Madrid, Barcelona, Francia, Suiza, Alemania…). Los años 60 fueron cruciales en este decaimiento de la devoción. En los años iniciales del siglo XXI tuvo lugar otro renacimiento, llevado a cabo por devotos de esta bella tierra de Sierra Mágina, como se detallará más adelante.
Este trabajo es un bello recuerdo para todos los Cofrades que durante estos dos siglos han mantenido el fervor religioso a través de “El Amarrao”. Será, por tanto, un aliciente importante el ver los nombres de nuestros antepasados reflejados en este libro.
La Cofradía nació el 19 de marzo de 1821. La primera estación de Penitencia tuvo lugar el 20/IV/1821. Una Hermandad fue constituida por dos vecinos muy devotos que fomentaron la devoción del Señor flagelado en la Columna. Así consta en el Acta fundacional. El Hermano Mayor fue Antonio Herrera. Los primeros cuatro horquilleros: Gabriel Molero, Cristóbal Troyano, Joaquín de las Peñas y Ramón López. Los cofrades encargados de pedir para el sustento de la Cofradía fueron José López y Juan José López. También aparecen a partir del año 1827 los encargados de pedir para comprar un Palio de Trono.
En 1839 los hermanos cofrades se denominaron Esclavos de la Hermandad de la Columna o Esclavos del “Amarrao”, realizando sus estaciones de Penitencia hasta 1937. Desde los años 40 del siglo XX, nuestros padres, Pedro Suárez Guillén y Consuelo Chamorro Peñas custodian el Libro de la Hermandad, como consecuencia de la primera refundación de la Cofradía del Amarrado a la Columna, la cual tuvo lugar el 25/IV/1943.
Desaparecida la imagen, en los días aciagos de la Guerra Civil, donó una nueva imagen, la actual, nuestra abuela materna María Antonia Peñas Blanco, cumpliendo así con una promesa. Se reorganizó la Cofradía con 35 hermanos, gracias a los anhelos de Francisco Chamorro Medina, marido de la “donante” y abuelo nuestro, a quien se le nombró cofrade vitalicio. Debido a su pronto fallecimiento, pasó a ocupar su puesto en la Cofradía, su hijo mayor, Antonio Chamorro Peñas.
Los primeros Estatutos de la Hermandad del Santísimo Cristo Flagelado en la Columna se confeccionaron en 1955, siendo Presidente nuestro padre, Pedro Suárez Guillén. En 1956 se creó el Cuerpo de Camareras, organizado por nuestra madre, Consuelo Chamorro Peñas. Por tales motivos, nuestra madre se encargó de tener siempre el altar bien limpio y arreglado. Ella se encargaba de comprar las piezas de tela, blancas y moradas –púrpura- para que los Cofrades hicieran sus túnicas.
A principios de los años 60 nos fuimos a vivir a Madrid. Mi madre cayó enferma. Falleció en 1964 y ya nadie estuvo pendiente de la organización y mantenimiento de la Cofradía, dejando de realizar su estación de penitencia del Jueves Santo. A partir de 1965 y hasta el año 1999 sólo salía su imagen en procesión, sin Cofradía, en la Procesión General del Viernes Santo.
Siendo ya párroco Agustín Rodríguez Gómez (1999-2004) se produjo la bendición de la reconstitución de la Cofradía del Señor Amarrado a la Columna. El impulsor máximo, apoyado por el párroco y otros devotos, fue José Manuel Vega Rodríguez, un gran entusiasta de esta actualización de la Cofradía. A partir de 2005, todos los años tiene lugar el Pregón de Semana Santa. Sólo se ha interrumpido en este último año 2020. Por desgracia, parece que también se suspenderá este año 2021, en el que se cumple el 200 aniversario de la creación de la Cofradía.
Por ello, la edición de este libro cobra una mayor relevancia, por ser lo único que se puede hacer, amén de que los devotos de la Cofradía y el pueblo de Bedmar en pleno tendrán un bello recuerdo y la oportunidad de mostrar la gran devoción que profesan a su Cristo “Amarrao” a la Columna y la esperanza de que pronto volvamos a la normalidad.
Las ramas de la familia “Chamorro-Peñas”, que hay en Bedmar, están muy agradecida por esta larga y bella información, donde se puede ver que esta familia está muy unida al “Amarrao” desde mediados del siglo XIX. El primero que nos consta que sea familiar nuestro es Ildefonso Chamorro Zavala, quien perteneció a la Hermandad desde 1858 hasta 1885.
Fue Hermano Mayor en 1860. Era hermano de Antonio Chamorro Zabala, padre de nuestro abuelo Francisco Chamorro Medina. También aparece Antonio Peñas Ogáyar, padre de nuestra abuela María Antonia Peñas Blanco y miembro de la Cofradía desde 1885, llegando en 1900 a ser mayordomo de la misma. A partir de la donación del Santo Titular por nuestra abuela María Antonia Peñas Blanco todos sus hijos, nietos y biznietos –Antonio Chamorro Colmenero- fueron Cofrades del “Amarrao” hasta los años 60 del pasado siglo.
En este recuerdo y agradecimiento están también incluidas muchas familias bedmarenses que a buen seguro reconocerán a sus antepasados. El libro es un bello recuerdo de todos y cada uno de los Cofrades que, durante dos siglos, han mantenido el fervor religioso y su fe a través del “Amarrao”.
Queremos resaltar también, con gran admiración, la importancia que tienen las Cofradías de Penitencia y de Gloria en nuestra villa, pues además de las de Penitencia: El “Amarrao”, Nuestro Padre Jesús Nazareno y la Virgen de los Dolores, Santo Entierro y Resucitado, queremos recordar a las Cofradías de Gloria: Nuestra Señora de Cuadros, San José y San Isidro… Todas ellas sirven para revivir en nosotros la fe, el compromiso cristiano del amor y el perdón… Nos ayudan a aunar nuestros corazones en la tradición familiar y popular de nuestro pueblo.
A pesar de que muchos vivamos fuera del municipio, nuestro vínculo es más encendido y vivo debido a estas devociones populares. Sólo deseamos que las celebraciones no se centren tan solo en lo folklórico, muy interesante, sino principalmente en Nuestro Señor, en su bendita Madre y Santos admirados.
Para terminar, queremos, de nuevo, dar las gracias a José Manuel Troyano Viedma, autor del Libro. Simplemente, el trabajo es admirable. Málaga, enero de 2021”.
El contenido del libro es el que sigue:
Introducción.- La Iglesia de Bedmar a finales del siglo XVIII y comienzos del siglo XIX.
Capítulo Iº. La Creación de la Hermandad de Esclavos –Cofradía- del “Amarrao” de Bedmar, bajo el reinado de Fernando VII –Trienio Liberal- (1821-1823). -Historia de la Hermandad de Penitencia del Santísimo Cristo Flagelado en la Columna de Bedmar (1821-1939). -Reinado de Fernando VII –“Década Ominosa” (1823-1833). -Minoría de edad de Isabel IIª: Regencia de María Cristina (1833-1840). -Regencia de D. Baldomero Espartero (1840-1843). -Reinado de Isabel IIª (1843-1868). -El Sexenio Revolucionario (1868-1874): Gobierno Provisional (19/IX/1868-2/I/1871). -Reinado de Amadeo de Saboya (2//I/1871-11/II/1873). -La Iª República (14/II/1873-3/I/1874). -Gobierno del General Serrano (3/I/1874-29/XII/1874). -La Restauración Monárquica (1875-1931): Reinado de Alfonso XII (1875-1885). -Regencia de María Cristina de Habsburgo-Lorena (1885-1902). -Reinado de Alfonso XIII (1902-1931). -Dictadura de D. Miguel Primo de Rivera (13/IX/1923-28/I/1930). -La “Dictablanda” (28/I/1930-14/IV/1931). -IIª República Española (1931-1939). -Guerra Civil Española: La Iglesia Parroquial de Bedmar, la Cofradía del Amarrao a la Columna durante la Guerra Civil Española (18/VII/1936-1/IV/1939).
Capítulo IIº. Dictadura del General D. Francisco Franco (1/IV/1939-20/XI/1975). -La Iglesia bedmarense entre 1939-1943. -La 1ª refundación de la Cofradía del Amarrado a la Columna de Bedmar (1943-1962). -Los primeros Estatutos de la Hermandad del Santísimo Cristo Flagelado en la Columna. -Año de 1956. Presidente-Hermano Mayor: D. Pedro Suárez Guillén. -Año 1958. -Año 1959. -Años 1960-1962 -La vida de la desparecida Cofradía entre 1962 y 1997.
Capítulo IIIº. La 2ª Refundación de la Cofradía de Jesús Flagelado y atado a la Columna (1997-2021).- -La vida de la Pro-Cofradía del Amarrao a la Columna de Bedmar durante la Democracia consolidada en los años iniciales del siglo XXI. -La antigua Cofradía
del Santísimo Cristo Flagelado a la Columna –“El Amarrao”- una vez más en las calles de Bedmar, como COFRADÍA (2008-2021): -La vida cofrade de los Hermanos del “Amarrao” a la Columna de Bedmar: De 2008 a 2020. -Los “pregoneros” de la Semana Santa de Bedmar (2005-2019). -La Semana Santa de Bedmar y los primeros carteles. -Jueves Santo en Bedmar: Jesús Flagelado en la Columna y Costaleros (Poesías y Dibujos)
Apéndice documental. -Última noticia (2021). Fuentes y Bibliografía. Epílogo (Por D. Manuel Jesús Rus Quesada. Párroco de la Asunción de Bedmar).
Fuente: El Autor José Manuel Troyano Chicharro.