POR JOSÉ MANUEL TROYANO VIEDMA. CRONISTA DE BEDMAR Y DE GARCIEZ (JAÉN)

A las 8,30 horas del martes, 18/X/2016, y dentro del Programa de Actos de la XXVIII Semana Cultural de Jaén en Granada (17-22/X/2016) tuvo lugar en el Salón de Actos “Juan Machado” de la Casa de Jaén en Granada, sita en la C/. Jardines de la capital de la Alhambra, un emotivo Homenaje a D. Vicente Oya Rodríguez, Cronista Oficial de la Provincia de Jaén y Premio Casa de Jaén en Granada 2001, con motivo de su reciente fallecimiento y en reconocimiento a su defensa constante de los valores giennenses. En dicho acto, el cual estuvo presidido por D. Apolonio Carabaño Jiménez (Úbeda, 1948), quien recordó el cariño que siempre tuvo D. Vicente para esta Casa, de la que en la actualidad es su Presidente, al tiempo que fue presentando a los tres Cronistas Giennenses que hablaron, en este orden sobre el ya desaparecido Cronista de Jaén, Cambil-Arbuniel y de la Provincia de Jaén: D. José Manuel Troyano Viedma, Cronista Oficial de Bedmar y de Garciez (Jaén), quien disertó sobre “Vicente Oya y su Cambil natal”; D. Antonio Rivas Morales, Cronista Oficial de Alcaudete (Jaén), quien glosó su personalidad como columnista en los Diarios: JAÉN e IDEAL y dio lectura a dos de ellas: “Los Cortijos” y “La Nieve”, siempre acompañado D. Vicente por “Gacelo, su pajarillo amigo”, finalizando el acto D. Guillermo Sena Medina, Cronista Oficial de La Real Carolina (Jaén), quien además de recordar a D. Vicente Oya, con entrañables, sentidas, sinceras y poéticas palabras dio lectura a su artículo sobre D. Vicente, una vez que conoció su fallecimiento, ocurrido en Beas de Segura el 10/VIII/2016 y que fue publicado en IDEAL-Jaén el 14/VIII/2016.

Fue un acto lleno de sentimientos por todos los asistentes y al final del mismo el Presidente de la Casa de Jaén en Granada, el ya referido D. Apolonio, entregó a D. José Manuel Troyano Viedma un Diploma para que lo hiciese llegar a sus familiares. Cosa que agradeció en nombre de los mismos, sabedor del cariño que siempre se le tuvo y se le tendrá en esa Casa a D. Vicente Oya Rodríguez. El texto del referido DIPLOMA dice lo que sigue: “La Junta Directiva de la Casa de Jaén en Granada en su reunión del pasado día 13 de Septiembre de 2016, acordó por unanimidad, celebrar un Homenaje durante la XXVIII Semana Cultural de Jaén en Granada a D. VICENTE OYA RODRÍGUEZ, Cronista Oficial de la Provincia de Jaén y Premio Casa de Jaén en Granada 2001, con motivo de su fallecimiento y en reconocimiento a su defensa constante de los valores giennenses. Granada a 18 de octubre de 2016. Vº. Bº. El Presidente. Apolonio Carabaño Jiménez. La Secretaria. María del Carmen Sánchez Fernández. Sello de la Casa de Jaén en Granada”.

Palabras de los intervinientes en el Homenaje a D. Vicente Oya Rodríguez en la Casa de Jaén en Granada, el 18/X/2016.

D. Apolonio Carabaño Jiménez (Úbeda, 1948), Presidente de la Casa de Jaén en Granada, recordó el cariño que siempre tuvo D. Vicente para esta Casa a la que acudió siempre que fue requerido.

A continuación fue presentando y dando la palabra a los tres Cronistas Giennenses que hablarón, por este orden sobre el ya desaparecido Cronista de Jaén, de Cambil-Arbuniel y de la Provincia de Jaén:

D. José Manuel Troyano Viedma, Cronista Oficial de Bedmar y de Garciez (Jaén), quien disertó sobre “Vicente Oya y su Cambil natal”:

“D. Vicente Oya Rodríguez (Cambil, 8/XII/1937-Beas de Segura/Jaén, 10/VIII/2016), cuya Corporación Municipal en la sesión plenaria del día 2/VII/1981, tomó el acuerdo unánime de nombrar a D. Vicente Oya Rodríguez como Cronista Oficial de la Villa, hacía justicia a la labor que había desarrollado y desarrollaría con posterioridad, aunque con anterioridad lo fue de la ciudad de Jaén –(9/V/1975)- de gran tradición histórica en sus relaciones con Cambil desde el mismo momento de su conquista, pues de ella dependería hasta su independencia como Villa a mediados del S. XVI. Yo lo soy de Bedmar y Garciez desde el 7/VII/1975, y ambos fuimos Miembros Fundadores de la Asociación de Cronistas e Investigadores de Sierra Mágina en 1983 y de la Asociación Provincial de Cronistas Oficiales “Reino de Jaén” en 1989, de la que él ha sido su primer Presidente y luego Presidente de Honor. Trabajamos codo con codo desde 1977 en la potenciación de la figura del Cronista Oficial, tanto a nivel provincial como nacional, sobre todo desde que en diciembre de 1976 -9 al 11- se celebró entre Madrid y Toledo el I Congreso Nacional de Cronistas Oficiales y al que tuvo la fortuna de acudir y convertirme a día de hoy, en el Miembro más antiguo de la RAECO, pues cumpliré, si Dios quiere, los 40 años en ella el próximo día 9/XII/2016. Poco tiempo después se incorporó mi amigo Vicente, y en la Real Asociación Española de Cronistas Oficiales ha sido, primero Vocal y luego Secretario General y desde 2015: Miembro de Honor de la misma.

D. Vicente Oya Rodríguez fue un hombre enamorado de su pueblo natal, que gozó siempre de una gran capacidad de trabajo, tal y como queda demostrado a lo largo de toda su vida, tanto como Periodista, Investigador y profundo Poeta, que ha llevado el nombre de del Municipio de Cambil y de Jaén por toda España, motivos estos por los que en el mes de febrero de este año tuviese el gran honor de recibir el Título de Cronista Oficial de la Provincia, por acuerdo unánime de toda la Corporación Provincial, bajo la Presidencia de D. Francisco Reyes Martínez.

Ha tenido la suerte de asistir a todos y cada uno de los homenajes que en Cambil ha recibido, en justa y legítima recompensa por su labor en pro de las tradiciones y costumbres de su villa natal, las cuales hoy están más vivas que nunca, gracias a sus trabajos y a la dedicación que en cuerpo y alma tuvo siempre hacia su pueblo y sus gentes, todo lo cual hizo que la Corporación Municipal le nombrase Hijo Predilecto de Cambil-Arbuniel –(10/X/2010)- y le diese su nombre al Colegio Público de Educación Infantil de Cambil en 2014, bajo la alcaldía de D. Miguel Ángel García Martos. En definitiva decir que ha sido “Profeta en su Tierra” y los homenajes más importantes los recibió en vida y los disfrutó en compañía de familiares y amigos.

Vaya también desde aquí mi recuerdo cariñoso y especial para su esposa Isabel, su hijo y su queridísima hija, así como para su nieta -que tanta felicidad llevó a su casa en los últimos años, junto a ese quehacer diario de escribir su artículo para el periódico-. Una ardua tarea, esta última, que fue capaz de realizar durante más de 50 años.

Dentro de esa bonhomía quiero destacar también en estas palabras introductorias la gran labor social que ha realizado en APROMPSI, una obra de la que toda la Provincia se ha de sentir orgullosa y por ello ha de quedar en la memoria colectiva del Santo Reino de Jaén el nombre de este insigne giennense llamado: Vicente Oya Rodríguez y que a juicio de todos los que tras su marcha han escrito sobre él han coincidido en decir: “Vicente Oya que estás en el Cielo”, pues “Bueno” es la palabra que mejor le caracteriza, ya que la llevaba siempre en su semblante de hombre de bien, de hombre capaz, de hombre que se entregaba en cuerpo y alma a los demás por solo la amistad y sin pedir nada a cambio. Sobre su sincera humildad referiros tan solo un fragmento del email que me envió el 22/XI/2012, como consecuencia de un trabajo que realicé sobre él, donde además de darme las gracias y a propósito de la fecha de su nacimiento me decía lo que sigue: “Hace unos años pusieron en una semblanza que yo había nacido en 1939 y me callé porque me beneficiaba en dos años. Desde ahora hay que poner 8 de diciembre, día de la Inmaculada, de 1937. Soy dos años más viejo. Pido perdón”.

D. Vicente Oya Rodríguez como ya hemos dicho nació en la serrana y “maginense” villa de Cambil (Jaén) –una población con solera- el 8/XII/1937 y falleció en otra población serrana de la Sierra de Segura y Las Villa, la tierra de su querida Isabel, Beas de Segura (Jaén), 10/VIII/2016. Tras el fallecimiento de su padre, con apenas diez años -1947-, hubo de trasladarse con su madre y hermanos a la capital del Santo Reino, aunque su identidad de cambileño es una sombra perenne que llevó con gozo, pues de Cambil son sus primeros recuerdos de infancia: Bautizo en la Parroquial de Nuestra Señora de la Encarnación, sus primeros estudios en las Escuelas Nacionales de la Villa con su fotografía de rigor, para dejar constancia de una época y de un estilo de vida de la dura postguerra; la catequesis y su Primera Comunión, ante el magnífico retablo de Sebastián de Solís que preside su Altar Mayor.

El 17/VII/1966, D. Miguel Fernández, en su sección “Ventana de Madrid” del Diario “JAÉN” comunicaba a la opinión pública giennense que D. Vicente Oya Rodríguez había sido distinguido con el importante premio “Segura de la Sierra”, al tiempo que añadía el siguiente comentario: “un hombre, D. Vicente, que empezó de peón en el mundo periodístico y que puede llegar a capataz con solo que se lo proponga seriamente y la suerte no le juegue una mala pasada, pues tiene corazón ancho y vibración emocional, dos poderes que sabiamente administrados dan mucho juego a la profesión, siempre que como bien decía D. Miguel de Unamuno siga “!Adelante, siempre adelante!”. No le defraudó jamás nuestro querido y admirado D. Vicente Oya Rodríguez.

En este año de 2016, coincidiendo con los días de la “preferia” de las Fiestas del Verano, en honor de Nuestra Señora de la Asunción de Cambil, se produjo el fallecimiento de este cambileño ilustre, D. Vicente Oya Rodríguez y por tal motivo “LA JORNADA DE PREFERIA, EN LA QUE SE IBAN A CELEBRAR UNAS JORNADAS DEPORTIVAS Y UNA FIESTA, SE SUSPENDIERON”, con el fin de honrar y respetar la memoria de este Hijo Predilecto de Cambil. Fue una muerte inesperada y se sintió de una manera muy especial en el Cambil de sus amores.

Cambil, a juicio de D. Vicente Oya Rodríguez, “está en un bellísimo valle, como escondido, con su caserío apiñado a las laderas de los cerros Engeño y Anchuelo, con dos impresionantes rocas, a modo de escudos protectores, en un gran desfiladero”. El Municipio de Cambil y Arbuniel, tras las fusiones ideadas por el Gobernador Civil de Jaén, D. Pascual Calderón Ostos, entre 1974 y 1975, contaba su término municipal con un total de 138,78 Km2, y que se encuentra a 756 metros de altitud sobre el nivel del mar, lo conformaban cinco entidades de población: Cambil. Arbuniel. Cortijuelo. Mata-Begid y Santa María, que en 1985 albergaban a 1.158 familias y cerca de 5.000 habitantes, aunque hoy su número ha descendido hasta los 3.000, por causa de la emigración. Este Municipio se encuentra dentro del Parque Natural de Sierra Mágina, declarado y creado como tal por la Ley 2/1989, de 18 de julio y la riqueza de sus tierras se debe a la abundancia de sus aguas que manan de sus innumerables fuentes o nacimientos, algunos de los cuales dan lugar a los ríos Oviedo y Villanueva, que se juntan en pleno centro de la villa de Cambil, sin olvidar al río Arbuniel, rico en cangrejos y en aguas terapéuticas, pero todos ellos afluentes del Río Guadalbullón dentro de la Cuenca Hidrográfica del Río Guadalquivir.

Pero me ceñiré ahora al encargo que mi gran amigo D. Guillermo Sena Medina, me pidió para este Acto de Homenaje a D. Vicente Oya Rodríguez en esta ilustre casa de Jaén en Granada: “D. Vicente Oya y Cambil” y por ello, además de las pinceladas antes dichas, he de referir algunas de las cosas grandes que a mi juicio D. Vicente hizo por y para sus paisanos de Cambil en diversos momentos de su dilatada vida y prolífica obra, de la que en mi libro: Semblanza sobre la vida y la obra de D. Vicente Oya Rodríguez, publicado en el pasado año de 2015, doy cumplida cuenta. Pero vayamos a D. Vicente y Cambil:

En la tarde del Viernes Santo cambileño, durante los Oficios, el Cura-Párroco pronunciaba el tradicional Sermón de las Siete Palabras, en un templo completamente abarrotado de gente. En él, el sacerdote iba glosando cada una de las palabras de Cristo en la Cruz, mientras que los “armaos” de pie, especie de cohorte romana, formando un círculo, permanecían en el centro de la Iglesia, con sus lanzas en ristre apuntando hacia arriba, atentos al momento en que el cura-párroco pronunciase la última frase de su Sermón: “E inclinando la cabeza, expiró”; momento en que los “armaos” volvían sus lanzas contra el suelo con gran estrépito, dejando cada año en el pavimento algo más que una huella: “numerosos agujeros que luego habría que reparar”, a juicio de D. Vicente Oya Rodríguez.

También era costumbre que en ese día de Viernes Santo se cantara por parte del Párroco y el Sochantre el “Sermón de la Madrugada”, compuesto por la “Confortación del Ángel”, “la Sentencia de Pilatos” y confeccionado su texto por el “El Cronista”, nuestro querido Vicente, ya desaparecido y de tanta memoria para esta villa, y del que señalamos lo que sigue: “Este Sermón o Pregón dialogado entre el Prior y el Sochantre se producía entre las tres y las cuatro de la madrugada, en una Iglesia Parroquial repleta de fieles. A tal fin el señor Prior ocupaba el ya desaparecido púlpito y frente al Sochantre, quien ocupaba uno de los amplios Coros, desarrollaban entre ambos un sencillo y emotivo diálogo que tenía como objetivo glosar la Vida y la Pasión de Jesús. El prior iniciaba el Sermón para relatar los hechos más significativos de la Vida y Pasión de Cristo y de vez en cuando se producía una pausa para que interviniera el Sochantre quien lo hacía con estrofas musicales, cantando textos como los que siguen:

El cáliz de la Pasión,
que lo bebas es preciso,
para ir al Paraíso
¡Oh Divino, en tu Pasión!”

Seguía el Prior con su relato, dando respuesta a las palabras del Sochantre y también el Cura introducía unos versos:

Calla demonio infernal,
calla infame pregonero,
no sabes a quien ofendes,
es el Dios de la tierra y el cielo”.

De esta manera se adentraban ambos, entre palabras de Sermón y Versos cantados, en un clima de emoción que trascendía a los fieles, hasta el punto que todos ellos se convertían en verdaderos protagonistas de las escenas comentadas. Llegándose así al final, donde, el Prior concluía su intervención con unos versos, los cuales terminaría cantando el Sochantre:

Ya está la sentencia dada,
por Pilatos, presidente
que muera el Crucificado
entre la judía gente”.

Nos quedará siempre el recuerdo de D. Vicente Oya Rodríguez, cuando nos decía cómo había momentos en el Pregón dialogado en los que el Sochantre llegaba incluso a imitar el Canto del Gallo, con el fin de recordar a los fieles, las veces que, durante la Pasión, San Pedro llegó a negar a Jesús. Una escena que recordaba el referido Cronista Oficial haberla visto interpretar de manera magistral por el Prior D. Sebastián López Amaro y los Sochantres: D. Juan Hidalgo, conocido por “Juanico el Sochantre” y D. Pedro el Sacristán.

Otra de las múltiples notas que sobre tradiciones y costumbres nos dejó D. Vicente Oya Rodríguez, es por ejemplo, la del día de los Santos Inocentes, pues el 28 de diciembre, también es conocido en Cambil como la Fiesta de la Advocación, era un día propicio para gastar bromas que se prolongaban hasta la Noche Vieja. Los “adagios” –Sentencias breves de inspiración culta o popular y de contenido moral o doctrinal– se repetían una y otra vez y a tal fin se metían en tres recipientes distintos, los nombres de muchachos, de muchachas y los “piropos” o “adagios” dedicados por ellos a ellas. Luego, una mano inocente sacaba el nombre de una muchacha, otra el del muchacho y otra el piropo, formando amores, en ocasiones posibles y en otras imposible. Por la noche, según D. Vicente, se realizaban reuniones familiares en las que se comían gachas, gallina en pepitoria y buñuelos. Después se bailaba el “bello” fandango de Cambil, cuya letra dice así:

Yo me subí en un tomillo
huyendo de la humedad,
la raíz la cortó un grillo
y al suelo vine a parar.

Compañero bailaor
átate las alpargatas,
no vayas a “trompezar”
y a esa rubia me la mates.

Una rubia me engañó,
a la orilla del río,
¿cuándo volverá la rubia
a tener bromas conmigo?

La luna, cuando va llena,
no muestra tanto ricor
como muestra mi serrana
cuando va a misa mayor.

La oliva echa la trama;
la trama las aceitunas;
tú tienes muchas palabras,
yo no tengo más que una.

Que tú eres la altiva palma,
la madre de los palmitos,
y en los rincones del alma
me dan con los cogollitos”.

El Ayuntamiento de Cambil, en 1985, publicó la obra del Cronista Oficial de la Villa, D. Vicente Oya Rodríguez, titulada: Cambil: Geografía, historia, costumbres y tradiciones. 1485-1985. Monografía del V Centenario de la conquista de Cambil (Jaén), en cuya portada va el Cartel del V Centenario, obra del pintor D. Ángel Beiztegui y en la que escribió la siguiente dedicatoria: “Al pueblo de Cambil cuando celebra, con gozo, el V Centenario de la conquista de sus famosos castillos. Al Ayuntamiento, la más genuina representación de cuantos viven y se afanan, cada día, en esta villa de nuestros amores. Muy especialmente a todos los niños y las niñas, a los alumnos y alumnas de los Colegios Públicos Castillo de Alhabar, de Cambil y Padre Manjón, de Arbuniel, con el sincero deseo de que estos datos sirvan a todos para introducirse en un mayor conocimiento de la geografía, la historia, las costumbres y las tradiciones del pueblo que nos entregaron nuestros mayores y que hemos de legar a las futuras generaciones. Con el deseo, en definitiva, de que, ahondando en el conocimiento de nuestro pueblo, lleguemos a quererlo más cada día, y que ese cariño se traduzca en un trabajo eficaz y solidario de todos juntos para contribuir al bienestar y grandeza de la tierra que nos viera nacer”.

Pero hasta llegar a la celebración de dicha conmemoración, ocurrieron una serie de hechos, que de la mano del referido Cronista Oficial de Cambil, les paso a relatar, como fruto de la unión de muchas voluntades, tanto internas como externas al Municipio y bien coordinadas por el Ayuntamiento, capaz de aunar sugerencias, inquietudes y voluntades: Fue en 1978, cuando con motivo del primer Pregón de las Fiestas del Señor del Mármol, Patrón de Cambil, se advirtió de la proximidad del Centenario, aunque en ese momento aún no se había tomado la decisión de tal celebración. Sería en agosto de 1980 cuando el estudioso D. Manuel de Vilches y Aguilera habló con el Párroco, D. Miguel Vallejos Palomo, y posteriormente con el Alcalde, D. Juan Ramírez Cámara y les puso de manifiesto la necesidad de rememorar en su V Centenario, la conquista de Cambil –(1485)-, por ser “un hecho histórico de especial significación para la villa cambileña y para el Santo Reino de Jaén”. La idea se fue madurando en los años siguientes y finalmente en 1984, el Ayuntamiento de Cambil acordó iniciar los preparativos de dicha conmemoración, cosa que se produjo en la sesión municipal del 11/IV/1984, donde, por unanimidad, se nombró a D. Vicente Oya Rodríguez como Coordinador General de los actos a celebrar y se facultó al Sr. Alcalde para la constitución de una Comisión Organizadora, que fue nombrada en el Pleno del día 26/X/1984 bajo su Presidencia: “Presidente.- D. Juan Ramírez Cámara. Vicepresidente.- D. Manuel García García. Vocales.- D. Juan de Dios Castro Ruiz. D. Francisco García Vico. D. José Guzmán Justicia. D. Juan José Prieto Prieto y D. Miguel Vallejos Palomo. Secretario.- D. Rafael Fernández Guzmán”. A partir de aquí el acontecimiento histórico que se quería rememorar comienza a divulgarse de todas las formas y maneras posibles, de las que destacamos las que siguen: 1ª) A nivel local los escolares de Cambil y Arbuniel comenzaron, guiados por sus Maestros, a escribir retazos de su historia en las páginas de su periódico –JUVE-CAMBAR, 84- (Juventud de Cambil y Arbuniel), mientras que el referido Párroco aprovechaba cualquier acontecimiento de la vida religiosa local para dar cuenta de la marcha de los distintos actos a celebrar con motivo de tal conmemoración. 2ª) El 19/II/1984 en la Casa de Granada en Madrid, los cambileños residentes en la Capital de la nación, aglutinados por D. Pedro y D. Anselmo García, celebraron actos dedicados a Cambil, en los que participó dictando una Conferencia D. Vicente Oya Rodríguez sobre la Historia de Cambil, la cual fue grabada en cinta magnetofónica y reproducida hasta la saciedad, debido a la demanda de la misma. Fue todo un éxito y el pistoletazo de partida. 3ª) El 8/IV/1984, con motivo de la celebración de la IIª Reunión de Cronistas e Investigadores de Sierra Mágina en la localidad de Campillo de Arenas, el Cronista Oficial de la Villa y de la ciudad de Jaén, presentó la siguiente comunicación: “Ante el V Centenario de la Toma de Cambil por los Reyes Católicos”, al tiempo que propuso, y así se acordó por unanimidad de los asistentes, que la IIIª Reunión se celebrase en Cambil en 1985, quedando constancia de ello en las páginas del Diario “Jaén” de los días 5 y 10/IV/1984. 4ª) En octubre de 1984, en la Sede del Instituto de Estudios de Historia Municipal, de Barcelona, con motivo del XI Congreso Nacional de Cronistas Oficiales de España, D. Vicente Oya Rodríguez, presentó dos comunicaciones y una de ellas versó sobre “Los Castillos de Cambil y Alhabar, últimos baluartes de los moros en la provincia de Jaén”, de lo que además de quedar constancia en sendas noticias de los diarios “Jaén” e “Ideal” del día 25/X/1984, quedó impresa en el Libro de Actas de dicho Congreso. 5ª) El 6/XII/1984, en el Salón “alto” del Arco de San Lorenzo, de Jaén, y en un acto organizado por la Asociación de Amigos de San Antón, el citado Cronista Oficial de Cambil y de Jaén, pronunció una Conferencia titulada: “Ante el V Centenario de la toma de los Castillos de Cambil y Alhabar”. Un acto en el que estuvieron presentes el Alcalde del Municipio, D. Juan Ramírez Cámara, acompañado por varios miembros de su Corporación Municipal: D. Francisco García Vico, Senador e hijo de Cambil. D. Juan de Dios Castro Ruiz, Juez de Paz. D. Miguel Vallejos Palomo, Cura-Párroco de Cambil y Arbuniel, así como varios miembros del Magisterio Local, miembros de la Cofradía del Señor del Mármol y numerosos cambileños llegados de la villa o residentes en Jaén, tal y como se puso de manifiesto en las páginas del Diario “Jaén” de los días 5 y 9/XII/1984 y del Diario “Ideal-Jaén” de los días 6 y 8/XII/1984: ¿Cómo surgió la conmemoración y porqué de estas publicaciones? Cambil y enero de 1985). Pp. 5-9 y Documentos Municipales del V Centenario de la Conquista de los Castillos de Cambil y Alhabar (1485-1985), pp. 40-41, a modo de Anexo.

Pero uno de los hechos más notables de esta conmemoración ocurrió el 30/I/1985 en el Cine FAS de Cambil, totalmente lleno, para escuchar la Conferencia Inaugural de los Actos conmemorativos del V Centenario de la Conquista de los Castillos de Cambil y Alhabar, hecho histórico que tuvo lugar el 21/IX/1485. Una Conferencia que estuvo a cargo del Coordinador General de V Centenario, D. Vicente Oya Rodríguez, bajo la presidencia del Sr. Alcalde acompañado de las más altas autoridades, tanto civiles, como militares de la localidad. En la presentación del Acto y del Conferenciante, D. Juan Ramírez Cámara dijo, entre otras cosas, lo siguiente: “El Ayuntamiento de Cambil había preparado estos actos conmemorativos con el mayor cariño y que para ello había contado con la ayuda de la Delegación Municipal de Cultura, de la Comisión del V Centenario y de todo el Pueblo de Cambil, a través de sus distintos estamentos. Agradeció la ayuda que se esperaba del Gobierno Central, de la Junta de Andalucía, de la Diputación Provincial y de otras Instituciones, así como la ya prestada por D. Francisco García Vico, hijo de Cambil y Senador del Reino de España”. El conferenciante, tras ser felicitado públicamente por todo lo realizado en pro de esta efeméride, pasó a dictar su Conferencia, la cual fue desgranando de forma ordenada de acuerdo con los siguientes epígrafes: “Iº. Situación y accidentes geográficos de Cambil. IIº. Primeros datos históricos. IIIº. La Conquista de Cambil y Alhabar por los Reyes Católicos: a) Carta de los Reyes Católicos. b) Preparación del Cerco y avance sobre las fortalezas. IVº. Historia eclesiástica: Mata Begid, sede del primer Convento de los Basilios en España. Vº. Cambil y el Arte. VIº. Las Cofradías: a) La Cofradía de la Virgen de la Cabeza. b) Cofradía de Nuestra Señora del Rosario. c) Cofradía de las Ánimas del Purgatorio. d) Cofradía del Señor del Mármol, VIIº. Cambil y el Periodismo. VIIIº. Cambil y el Cine. IXº. Costumbres y tradiciones”. Todo lo cual recibió los sentidos y agradecidos aplausos del público asistente y se convirtió en la primera publicación de este V Centenario, con la debida Bibliografía y las ilustraciones justas y precisas sobre la Villa.

Las actividades programadas continuaron y así vemos como en febrero, con motivo de los actos dedicados al Patrón de la Villa, el Señor del Mármol, se encargó el Pregón a D. Diego Ogáyar, Médico-Militar, hijo de Cambil; en marzo, tuvo lugar un entrañable y memorable acto, el Homenaje de los Poetas cambileños a su Villa, actuando como mantenedor, el ilustre poeta D. Felipe Molina Verdejo; en abril, tuvieron lugar las conferencias que sobre el Arte en Cambil y el Retablo de su Iglesia Parroquial, pronunciaron los Doctores en Historia del Arte, D. Pedro Antonio Galera Andreu y Dª. Mari Luz de Ulierte Vázquez, todos estos actos de la mano del Coordinador General, es decir, de nuestro querido y recordado amigo Vicente.

Ya en mayo de ese mismo año D. Vicente Oya Rodríguez siguió empleándose a fondo sobre la conmemoración del V Centenario, en esta ocasión con motivo de la organización de la IIIª Reunión de Cronistas e Investigadores de Sierra Mágina, fundamentada en el Vº Centenario de la Toma de los Castillos de Cambil y Alhabar por los Reyes Católicos, de todo lo cual dio cuenta en una amplia Crónica en el Diario Jaén, ilustrado con magníficas imágenes de la villa y un magnífico dibujo de la fachada del Hospital barroco de Cambil. Un acto académico y congresual al que fui invitado por el entonces Alcalde de Cambil y Presidente de la Comisión Organizadora del V Centenario, D. Juan Ramírez Cámara, con la siguiente carta: “Cambil, 15 de Mayo de 1985. Sr. D. JOSÉ MANUEL TROYANO VIEDMA. Córdoba. Nuestro querido amigo: Como ya sabes el próximo domingo, día 19 de este mes de mayo, se va a celebrar, en Cambil y Arbuniel, la III Reunión de Cronistas e Investigadores de Sierra Mágina, a la que, con mucho gusto, y en nombre del Ayuntamiento, tengo el honor de invitarte, agradeciéndole de antemano su presencia y colaboración en el Ciclo Conmemorativo del V Centenario de la Conquista de Cambil que estamos celebrando durante el presente año. Le acompaño Programa de los Actos Organizados, deseándole una grata estancia entre nosotros. Reciba un abrazo de su buen amigo. Juan Ramírez Cámara. Rúbrica”. En efecto, el referido día 19 de mayo, tuvo lugar la referida IIIª Reunión Comarcal de los Cronistas e Investigadores de Sierra Mágina, en la que todos los asistentes pusieron de relieve la importancia histórica y artística de la villa de Cambil, haciéndonos entrega a cada uno de los comunicantes de un fantástico pergamino, obra de los Hermanos Senisse de Jaén.

En junio se realizó una reunión de Consejeros de Bellas Artes, la cual contó con la colaboración expresa y decidida de la Delegación Provincial de Cultura de la Junta de Andalucía en Jaén, donde se presentaron varias “comunicaciones” sobre Arquitectura Popular y en torno a este tema pronunció una Conferencia el Delegado Provincial de Cultura, D. Gabriel Ureña Portero, quien, “tanto oficial como personalmente, había mostrado un especial cariño porque Cambil fuese declarado Conjunto Histórico-Artístico”, algo que D. Vicente siempre propició y alentó.

Y ya para poner un punto y seguido diré, porque podríamos seguir aquí muchas horas más, hablando de la relación de D. Vicente sobre Cambil, que en ese mismo año de 1985, D. Vicente Oya Rodríguez, terminaba así su libro sobre Cambil y con ello quiero yo también terminar estas pinceladas sobre nuestro homenajeado por la Casa de Jaén en Granada y su pueblo natal: “Cambil sigue ahí, con su geografía, su historia, sus costumbres y tradiciones. También con su silencio laborioso, amasado por sus hombres y por sus mujeres, en la lenta agonía de los siglos. Cargado el pueblo con el peso de un pasado lleno de gloria y colmado de ilusión ante un futuro mejor”.

¡Muchas gracias a todos por vuestra atención!

D. Antonio Rivas Morales, Cronista Oficial de Alcaudete (Jaén), quien glosó su personalidad como columnista en los Diarios: JAÉN e IDEAL y dio lectura a dos de ellas: “Los Cortijos” y “La Nieve”, siempre acompañado D. Vicente por “Gacelo, su pajarillo amigo”.

D. Guillermo Sena Medina, Cronista Oficial de La Real Carolina (Jaén), quien además de recordar a D. Vicente Oya, con entrañables, sentidas, sinceras y poéticas palabras dio lectura a su artículo sobre D. Vicente, una vez que conoció su fallecimiento, ocurrido en Beas de Segura el 10/VIII/2016 y que fue publicado en IDEAL-Jaén el 14/VIII/2016:

“Hasta el cielo de Palma de Mallorca me ha llegado el eco del último latido de Vicente. Mi hermano me ha llamado nada más conocer la terrible noticia. “Gacelo” ha rendido su último vuelo, ya ha dejado de escudriñar las calles de Jaén en un inesperado adiós, que nos llena de tristeza a quienes le queríamos, a quienes le queremos, al prestigioso periodista, al escritor amigo.

Decir de Vicente Oya Rodríguez que era un hombre bueno es decir poca cosa. Era un privilegiado en eso de hacer el bien a los demás. Lo hacía como mejor sabía, con su pluma, limpia, verdadera, amable, sencilla, generosa y mil adjetivos más que podemos añadirle. Bien lo saben los de Aprompsi, que tanto le van a echar de menos.

Se me ha ido Vicente, y tengo la sensación de deberle algo, una llamada, una invitación granadina, un viaje a la capital, un abrazo… La verdad es que le debo tantas cosas que es difícil pasarlas al papel.

La última vez que hablamos fue de la nueva andadura de la Academia Bibliográfica “Virgen de la Capilla” que debe resucitar. Siempre me recordaba que era mi biógrafo y que teníamos que hacer la continuación de aquel generoso libro que me dedicó. En eso estábamos al llegar mi jubilación de Fiscal, el “Fiscal-Poeta”, como me bautizó para siempre.

Hace pocos días me acordaba de él. Aún no he mandado mi inscripción para el septembrino Congreso de la Asociación Nacional en Burgos. Y pensaba: “Cuando llegue a Granada llamaré a Vicente y lo arreglaremos”. Teníamos muchas ilusiones para este Congreso, que ya no será igual sin él. Ahora iré con más obligación, pues no puede faltar en esos días un emotivo y merecido recuerdo a su enorme labor como Cronista, como ex Presidente de nuestra Asociación Provincial, y como miembro que fue de la Junta Directiva de la RAECO y hoy uno de sus Miembros de Honor.

Vicente nos ha dejado huérfanos a los Cronistas, no digamos a los amigos. Ante cualquier problema, cualquier duda, cualquier acto cultural, teníamos la solución: llamar a Vicente Oya Rodríguez. Y de una u otra forma nos daba la respuesta oportuna. He perdido a un amigo “con quien tanto quería a esta maravillosa tierra de Jaén”. También lo ha perdido nuestra Provincia, y lo veremos con mayor nitidez cuando vayan pasando los días y nos falten sus artículos de IDEAL”.

Menos mal que en los últimos meses ha tenido la satisfacción de recibir parte de los merecidísimos reconocimientos que se le debían: La Medalla de la Junta de Andalucía. El nombramiento de Cronista de la Provincia. La Plaza del Ayuntamiento de la Capital. El Libro de Actas del último Congreso Nacional de Cronistas, etc. “No me creo lo que está pasando”, me decía con su habitual sencillez.

Se ha ido en tierras manriqueñas –(yo también creo que el poeta nació en la segureña Hornos)-. Jamás, y ahora menos, dejaré de recordar aquellos versos: “Nuestras vidas son los ríos / que van a parar al mar / que es el morir…”. Más concretamente, Vicente se nos fue en Beas, donde tanto gustaba ir con su mujer y sus hijos. En la carmelita Beas, con la presencia eterna de Santa Teresa y San Juan de la Cruz, que no le habrán dejado de su mano en aquellos postreros momentos y que le habrán acompañado para enseñarle “aquella eterna fonte” que ya no tendrá “escondida su manida” para el alma de Vicente, que tanto los llevó a sus escritos. “Amor con amor se paga”, dice nuestro refranero. O mejor, como él hacía siguiendo el dicho juancruciano: “Donde no hay amor, ponga amor y sacará amor”.

Además del profundo dolor por el amigo ausente, me entristece no haber podido acompañarlo a su postrero destino. Pero la distancia no me aleja de su familia ni de los compañeros Cronistas en el dolor de nuestro corazón. No he tenido el consuelo de una lágrima furtiva, pero va mi más sentida Oración por Vicente, aunque tengo la seguridad de que no la necesita. Quiero pensar que no ha sufrido, que la muerte tan imprevista no le habrá dado tiempo a sentir claramente su llamada.

No era tan mayor; pensábamos en nuestros próximos ochenta. Pero la vida es así de cruel, y dice adiós cuando ella quiere. Mi mujer me vuelve a recordar aquello de “velad y estad atentos, que no sabéis el día ni la hora”. Vicente estaba preparado, estoy seguro. Por eso sufro por su adiós, pero me queda el consuelo de que nos esperará “gustando allá un no sé qué / que se halla por ventura, / aunque es de noche”.

Escribo con la urgencia que me dicta el corazón. Tiempo habrá de hacerlo con la razón. Hasta siempre, querido compañero de tantos quereres, de tantos afanes, de tantas ilusiones jaeneras. Mi adiós con una copla:

“Solo me queda una pena
para contarla a la gente:
Que se me ha muerto mi amigo
Vicente Oya, Vicente”.

Muchas gracias por vuestra presencia”.