LOS HABITANTES AGUARDAN DESDE HACE CASI DOS AÑOS LA AMPLIACIÓN DEL CAMPOSANTO, QUE EL AYUNTAMIENTO ASEGURA QUE ESTÁ «CASI CERRADA», POR ANTONIO BOTÍAS SAUS, CRONISTA OFICIAL DE MURCIA
Morirse en la pedanía de Sangonera la Verde conlleva un problema añadido al de abandonar este mundo. O, cuando menos, eso advierten los vecinos que denuncian cómo apenas queda media docena de fosas libres en el cementerio, lo que en breve causará un grave problema en este pueblo donde viven, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), más de once mil habitantes. Así que no extraña que Carmen Gil, una de las vecinas, exclame: «¡Habrá que sortear las fosas!».
Pero la cuestión tiene poca gracia. Desde enero del año pasado muchos residentes en la pedanía denuncian la falta de espacio en el cementerio, que administra la parroquia. Desde allí también confirman que el problema ya era preocupante hace unos meses, cuando menos ahora. Hasta el extremo de que se vieron en la obligación de excavar fosas incluso en la plaza central del camposanto, usada hasta entonces como lugar donde se celebraban las tradicionales misas el Día de Difuntos.
El problema fue expuesto a la anterior Corporación municipal, aunque no ha sido hasta hace unos meses cuando se ha activado la expropiación de los terrenos, cuyos propietarios, que eran promotores, los ofrecieron en su día a cambio de encargarse de la ampliación.
Las gestiones se reactivaron antes del verano, aunque desde entonces poco han avanzado. O han avanzado lo justo para continuar impidiendo que se amplíe el lugar. «De momento, sabemos que el Ayuntamiento impulsaba la expropiación de los terrenos, pero mientras no se cierre el asunto, no se pueden acometer las obras», señalaba ayer José Marín, otro vecino que apostillaba con tanta sorna como preocupación: «Y la gente tiene la curiosa costumbre de seguir muriendo».
Un título del Obispado
Fuentes de la Concejalía de Patrimonio advierten de que «ya se completó el expediente de expropiación del suelo, trámite que era
necesario para que los terrenos pudieran pasar a propiedad municipal. Ahora ya lo son». Por tanto, el Ayuntamiento ultima el procedimiento, que en estos momentos, como añaden, «se encuentra pendiente de inscripción en el Registro de la Propiedad».
El Obispado de Cartagena, por su parte, también ha cumplido ya con el requisito de presentar ante el Consistorio el título del cementerio, trámite indispensable para cerrar la tramitación. Así las cosas, desde el Ayuntamiento señalan que «todo quedará resuelto previsiblemente esta misma semana». Y cuando esto se haya producido, la Junta de Gobierno adoptará el acuerdo de cesión al Obispado». Pero ni siquiera entonces se podrán iniciar las obras, a falta de las preceptivas licencias.
Fuente: https://www.laverdad.es/murcia/ciudad-murcia/protestas-falta-fosas-20181025013703-ntvo.html