POR JOSÉ ORTIZ GARCÍA, CRONISTA OFICIAL DE MONTORO (CÓRDOBA)
Con el deseo de que el mes de enero, la publicación de «Montoro en la Historia» llegue a todos los interesados en modo y forma, se han depositado en los centros de venta habituales y desde el día 28 de diciembre de 2018 en la oficina de correos, esperando no sucedan retrasos ajenos a mi persona.
En esta ocasión tenemos la oportunidad de conocer como el aceite de oliva comenzó su andadura particular de manos de la Casa Francés por tierras americanas, así de como su fábrica se ubicó durante más de un siglo en la actual C/ Cervantes.
Siguiendo con esta vía pública, hablaremos del origen del Cristo de los Caminantes y su relación con un antiguo Vía Crucis, así como del Parador de San Antonio.
En cuanto a la pieza del mes trataremos la moneda divisionaria de la parte montoreña asignada a la zona republicana durante la Guerra Civil Española, así como veremos, cómo el movimiento obrero fue pergeñándose en nuestra población gracias a la colaboración del licenciado en historia contemporánea D. Manuel Perales Solís.
La biografía de enero la dedicamos al paisano Cristóbal Fregenal Cazorla, persona trabajadora, sencilla y humilde, que ha sido un «embajador» de su pueblo y de la Mancomunidad de Municipios del Alto Guadalquivir por tierras del centro peninsular, formando parte de las Casas de Andalucía y de Córdoba, difundiendo la cultura y folklore particular de Montoro.
En cuanto a la historia de nuestras calles y plazas abordaremos la segunda parte de la C/ Santos Isasa, o calle de los Frailes, analizando la evolución de su urbanismo y algunas de sus curiosidades en ellas sucedidas. En el documento del mes descubriremos que en 1917 se alzó la llamada «Esquina Redonda» de la Plaza del Charco, donde posteriormente se emplazaría el desaparecido recientemente bar Belsay.