FUE A SUS 101 AÑOS EL CRONISTA OFICIAL MÁS LONGEVO DE ESPAÑA Y DECANO DE LOS CRONISTAS

Se ha cumplido recientemente el tercer aniversario del fallecimiento de quien fue uno de los historiadores, cronistas y pedagogo más destacado de España, toda un figura cultural don Fernando Jiménez de Gregorio.

Hace tres años, con sus tranquilos y a veces movidos 101 años se fue con toda tranquilidad y sin apenas hacer mucho ruido. Para los que tanto le respetábamos y queríamos, fue su desaparición sin duda una muy mala noticia, pero con el aprendimos y creímos en muchas cosas y nos dio animos para seguir escribiendo e investigando como lo hizo él toda su vida por toda España.

Ahora como compañero Cronista Oficial y miembro de la Real Asociación de Cronistas Oficiales (RAECO) y Presidente del Instituto de Estudios Históricos del Sur de Madrid que sigue llevando su nombre quiero recordarle como esa gran figura que fue.

La Real Academia informó el mismo dia de julio de 2012 de la muerte del historiador, nacido en Belvís de la Jara el 30 de mayo de 1911 y quien dedicó numerosos libros a la comarca de La Jara.

Fue profesor de Geografía e Historia en varios institutos de Educación Secundaria, en Toledo y Madrid, además de impartir clases en Plasencia y en la Universidad de Murcia durante varios años.

La Academia recuerda que siempre llevó ‘por montera’ la comarca de La Jara, de modo que ‘escasamente se pueda decir que existe algún pueblo jareño que no tenga su pequeña-gran historia desentrañada’ por el historiador, ‘ni su escudo y bandera por él pergeñados’.

‘Y a esos libros se han de añadir varios miles de artículos dedicados también a dar a conocer los paisajes, la historia, la arqueología, las tradiciones, la cultura jareña en general y la procedencia de los topónimos que toda esa sencilla y hermosa y abandonada comarca encierra’, añade.

Sostiene la Academia que ‘todo lo concerniente a La Jara le concernía a él’.

Y apunta que ‘lo más prodigioso de todo ello es que empezó a trabajar por La Jara, a preocuparse por esta comarca de todos olvidada a mediados de los años cuarenta, cuando tan sólo él y Dios sabían de la existencia de esta comarca repartida falazmente en cuatro provincias; cuando no esperaba galardón alguno por sus trabajos y desvelos’.

El Ayuntamiento de Talavera de la Reina, ciudad de la que era hijo adoptivo, decretó tres días de luto oficial por su muerte.Y el Instituto de Estudios Historicos del sur de Madrid y la Raeco, lamentaron con sendos comunicados su desaparición. Por siempre para siempre, hasta siempre don Fernando.

Juan Antonio Alonso Resalt