POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)
Nuestra amiga colunguesa MIMÍ RODRÍGUEZ CUERVO nos sorprendió ayer deleitándonos con la reproducción de un programa de fiestas lauretanas, en Colunga, con data de los primeros años del siglo XX.
Como ustedes pueden verlo en Facebook, y para no insistir en él, hoy les ofrecemos otro, aunque un poco «más moderno», correspondiente al año de 1930, último siendo Rey don Alfonso XIII, pues en abril de 1931 se proclamó la II República.
Estos programas festivos son, a mi entender, de sumo interés porque, además de ser con sus anuncios un testimonio de la vida industrial y comercial de la comarca, reflejan un costumbrismo festivo y religioso que hoy ya no existe.-
Por ejemplo : en aquellos años, y para el día grande de la fiesta, se anunciaba, como leemos en este programa de 1930, «Una MONUMENTAL VERBENA en la calle de Pidal, en la que lucirá colosal ILUMINACIÓN A LA VENECIANA a cargo del afamado «Panecillu», quemándose fuegos artificiales, cohetes de bengala, etc.».
¿Qué será eso -se preguntarán ustedes- de una iluminación a la veneciana»?
Fue muy frecuente en los finales del siglo XIX -y la moda vino de Italia- iluminar las plazas donde se celebraban festejos nocturnos, como verbenas, con farolillos recubiertos de vidrios de colores (o de papel) en los que en su interior lucía una velilla de cera.
Pasado el tiempo la velilla fue sustituida por pequeñas bombillas de incandescencia y , ya finalmente, por bombillas de colores diversos. Así las hemos conocido nosotros y creo que sean un recuerdo «irrecuperable».-
¿Y de la «música», qué quieren que les cuente?
Este año de 1930, actuaron la BANDA MUNICIPAL DE INFIESTO y la BANDA MILITAR DEL REGIMIENTO DE TARRAGONA, las cuales ofrecieron un concierto en el Campo de Loreto, ya finalizada la procesión del domingo; y el lunes, después de la misa en la Capilla, organizada por la Sociedad de Socorro Mutuo de Artesanos.
Concierto que se repetiría el martes por la mañana, en la Plaza, como invitación a la Jira a la playa, por la tarde.
De anuncios y orquestas hablaré mañana si, como dicen que decía un general que fue Jefe de Estado, «Dios me da vida y claridad de juicio».
NOTA.- Quiero agradecer muy sinceramente, y con mucho cariño, el valioso regalo de «cosas antiguas de Colunga» que me hizo JOSÉ ANTONIO LUEJE. Entre ellas está este programa festivo colungués.