POR MANUEL GARCÍA CIENFUGOS, CRONISTA OFICIAL DE MONTIJO Y LOBÓN (BADAJOZ)
Fue en 1987 cuando esta exposición se organizó desde la Universidad Popular de Montijo, con el patrocinio del Ayuntamiento y la colaboración del Licenciado en Bellas Artes, Juan Serrano Pascual (qepd).
Treinta y dos obras se exhibieron en la Sala de Exposiciones de la entonces Casa de la Cultura. Todas ellas procedente de la familia Gragera, religiosas clarisas (Los Siete Dolores) y amigos del pintor. Las obras acogían temáticas relacionados con asuntos religiosos, paisajes, escenas costumbristas, marinas, copias de grandes pintores como Ticiano, Luis de Morales y Bartolomé Esteban Murillo, entre otras.
Biografía
Francisco Gragera Tejeda nació en Montijo el 13 de octubre de 1909. Hijo de Toribio Gragera Piñero y Clementina Tejeda Campos. En 1926 terminó sus estudios de Bachillerato en el Colegio de los Jesuitas de Villafranca de los Barros, comenzando la carrera de Derecho en Granada y licenciándose posteriormente por la Universidad de Madrid. Ciudad de la que regresaría a Montijo al comenzar la Guerra Civil. Aunque sus deseos fueron siempre los de haber estudiado Arquitectura, pero no se cumplieron por imposición paterna. Murió repentinamente en Montijo el 23 de marzo de 1960.
Proyectó el trazado del parque municipal
De talante humanista, algo introvertido y amante de la Cultura -demostrado en su dedicación casi exclusiva al Dibujo y la Pintura- plasmando sus obras en cuadros, colchas, cojines y en bóvedas de interiores, que nunca llegaron a exponerse o venderse, sino que eran obsequiados a familiares y amigos.
Gragera Tejeda era un apasionado por la Fotografía y la Filatelia. Amigo de tertulias, teniendo fama de ser un excelente cocinero, decorador de interiores, diseñador de viviendas y todo aquello que estuviera relacionado con la estética y el buen gustó. Proyectó y dirigió la realización del Parque Municipal en 1940-1941. Fue cofundador de la Cofradía Nuestro Padre Jesús Nazareno y Ntra. Señora de la Piedad. Fue miembro de la Sección en Montijo de la Adoración Nocturna.
Su estilo
Su pintura, desde la crítica de Juan Serrano Pascual, es realista con alternancia de pinceladas suelta propias del estilo impresionista. Fue un pintor, principalmente paisajista, demostrando en sus pinturas el conocimiento de la técnica: forma, color, profundidad, perspectiva aérea, etc.
Probablemente sus paisajes sean copias de postales o calendarios, pero el tratamiento al óleo es diferente, los transforma, los depura de su estado fotográfico para impregnarlo de personalidad, de color. En resumidas cuentas, Kicote (como quería que le llamaran sus amigos) era un colorista, un enamorado de la luz.
Agradezco a Moni Acevedo Gragera la cesión del programa de la exposición.
Fuente: Faceboock