POR MANUEL LÓPEZ FERNÁNDEZ, CRONISTA OFICIAL DE VILLANUEVA DEL ARZOBISPO (JAÉN)
Publicación de La Moraleja número 90
Nos alegra poder divulgar la labor artística de tantos villanovenses, en este caso el de Rosa Román
“Nacer en Villanueva del Arzobispo me ha proporcionado una infancia feliz, tranquila, y a veces emocionante. El contacto con la naturaleza y la vida sencilla del pueblo marcaron en mi carácter un sello de identidad que difícilmente se borrará.
En mi adolescencia surge lo que empieza siendo hobby y acaba siendo una Pasión, el Arte. Como casi todos los que nos entregamos a lo artístico, desde pequeños nos vemos atraídos por el dibujo, la pintura… pero hay un momento de inflexión en el que decides dedicar gran parte de tu vida a ello. En ese momento, en mi vida fueron fundamentales tres personas, Mis padres María Valera y Antonio Román, que no solo me apoyaron sino que me enseñaron que en este mundo tienes que luchar por lo que te apasiona, y Moisés Bueno o Don Moisés, como todos le llamábamos, que me hizo un gran regalo; iniciarme en la disciplina del dibujo y el color. Sin él y su esposa Encarna Jorquera, que cada sábado, durante dos años me acogieron en su casa para pintar, hoy todo sería distinto.
Desde entonces ha pasado mucho tiempo; Estudié Bellas artes en Valencia, Postgrado en Barcelona, Doctorado en Sevilla y obtengo mi plaza de profesora Dibujo Artístico y Color en la Escuela De Arte de Sevilla. Ya son muchos los años que llevo dedicados a la enseñanza, una tarea apasionante a veces, y agotadora otras. Tienes que ser generosa, compartir, comunicar, transmitir y sobre todo emocionar.
Siempre he compartido mi tiempo entre esta profesión y la producción artística; pintura, dibujo, fotografía, instalaciones y la escultura… aunque he de decir que es difícil mantener a lo largo del tiempo esta doble vida laboral.
Algunos de mis proyectos realizados son; “La flor del cuerpo y el Tiempo” “Galguerías” “Naturalezas del amor” “Cuadernos de equipaje” “Paisajes habitados” y “Fragmentos de placer” … Y entre estos, he de incluir dos proyectos muy importantes para mí, los que realizo desde hace tiempo con mi compañero de viaje Juan Carlos de La Piedra, llamados; “Correspondencias Indeterminadas en el Tiempo” y “Dualismos”.
Todos estos proyectos, que a veces tanto cuesta sacar adelante, dan en parte sentido a mi vida y le aportan matices que hacen que merezca la pena ser vivida”.
Sus primeras exposiciones en la década de los ochenta las realizó en Villanueva del Arzobispo, Úbeda, Villacarrillo, Quesada, Vall de Uxó, Borja y Valencia. Desde entonces hasta ahora Rosa Román ha seguido trabajando y mostrando su obra en diversas exposiciones individuales y colectivas, además de realizar varias intervenciones artísticas en espacios públicos.
En el catálogo de la exposición “La flor del cuerpo y el tiempo”, Rosa finaliza con un texto “dedicado a aquellas mujeres que no reciben un trato digno ni disponen de la libertad para decidir sobre su propia vida”.