POR JUAN CUÉLLAR LÁZARO, CRONISTA OFICIAL DE FUENTEPIÑEL (SEGOVIA)
El 13 de agosto de 1884 murió Tomás de Frutos Lázaro, de 53 años, y según consta en el libro de difuntos de nuestro archivo parroquial «…sobre seis y media a siete de la mañana a consecuencia de un rayo que de un nublado cayó ayer a la hora ya citada que le dejó difunto en el acto… en el término de San Roque a la parte oriental de éste como doscientos pasos contiguo a una tierra suya, hallándole cadáver, como lo presenciaron el médico D. Sotero Galicia, el juez municipal Bernabé Gonzalo, y otras personas del pueblo». Todo lo que se de él es que era un tatarabuelo mío, al que llamaban el Tío Granjero porque procedía de las Granjas de San Bernardo de Sacramenia, y que la cruz que recuerda el sucedido lleva 135 años mirando a FUENTEPIÑEL desde la distancia.
Como bien dice el refranero, «De los nublados de mañana y de los concejos de tarde, Dios nos guarde».
¡Buen día!