POR JUAN CUÉLLAR LÁZARO, CRONISTA OFICIAL DE FUENTEPIÑEL (SEGOVIA)
«La flor de febrero nunca va al frutero». El invierno está siendo suave, sí, pero ya vendrá algún día de esos que al rayar el alba se encargan de dar certeza a este refrán. Este año, por tanto, tampoco comeremos almendrucos del almendro del majuelo de El Descansadero. Al tiempo.
Por cierto, ahora que me fijo, habrá que ir podando esas viejas cepas centenarias. Paso el aviso.