POR JUAN CUÉLLAR LÁZARO, CRONISTA OFICIAL DE FUENTEPIÑEL (SEGOVIA)
“Por la Virgen de agosto, el calor hace el mosto”. Y los tordos y los estorninos lo saben bien. Las uvas van pintando ya estos días, y bandadas de estas aves se ceban con los racimos hasta dejarlos mondos y lirondos. Y más este año que la cosecha viene bastante buena.
Una de las formas de defenderse contra ellas es cubrir las cepas con mallas, una actividad algo laboriosa pero bastante efectiva. Como refuerzo se puede recurrir a instalar los clásicos espantapájaros, que surten efecto los primeros días pero a los que se suelen acostumbrar y, como decimos por aquí, acaban anidando en sus bolsillos. Más difícil es defenderse de las avispas.
Nosotros hemos cumplido con estas recomendaciones y esperemos que en los primeros días de otoño podamos realizar el noble oficio de la vendimia y elaborar algunas cántaras de estos ancestrales caldos hoy pertenecientes a la denominación de origen Comarca de Valtiendas. Estáis todos invitados a la cata cuando llegue el momento.
¡Buen día!