En la sesión de cabildo del 28 de diciembre de 1809, tal día de los Santos inocentes como hoy, se leyó una carta-orden –dolorosa– pero necesaria en tiempo de guerra. En ella, el gobernador de la Cádiz e intendente de la provincia, Francisco Javier Venegas (1754-1838), insertaba una Real Orden, cuando España se desangraba humana y económicamente en la guerra contra el francés, cuando el ejército napoleónico estaba preparando la ofensiva sobre Andalucía:

«Que todos los vecinos y habitantes de estos Reynos, contribuyan por vía de préstamo forzoso con la mitad del oro y plata labrada que tengan en su poder en los términos y baxo [bajo] las formalidades que expresa la instrucción que acompaña (…); los Señores concurrentes, uniformes dixeron [dijeron], obedecían y obedecieron con el respeto debido, el superior precepto y mandaron se guarde, cumpla y execute [ejecute] en todo y por todo».

Así, mediante edictos y pregones en los sitios acostumbrados, «para que llegue a noticia de todos y tenga el pronto y debido cumplimiento; sobre lo qual [cual] el Señor Corregidor Presidente de este Cabildo, dictará las debidas providencias».

No era una inocentada, sino la cruda realidad provocada por una guerra que pronto alcanzaría, con sus tentáculos, a la «noble e invicta villa de Chiclana».

Bibliografía:

-ARCHIVO HISTÓRICO MUNICIPAL DE CHICLANA: Legajo nº 29. AA. CC. Sesión del 28 de diciembre de 1809.

-ARAGÓN PANÉS, J. L. (2024): «Chiclana de la Frontera desde los inicios de la guerra de la independencia hasta la ocupación». Ateneo de Chiclana. Vexel Estudio Publicitario. Imp. Gráficas Santa Teresa. Sanlúcar de Barrameda.

-FOTO. WIKIPEDIA: Francisco Javier Venegas