POR JUAN CUÉLLAR LÁZARO, CRONISTA OFICIAL DE FUENTEPIÑEL (SEGOVIA)
La fecha del 6 de mayo tiene una significación especial para los segovianos que residimos en Madrid pues este día de 1920 fue fundado el Centro Segoviano, una institución que durante estos 100 años ha sido un referente y un lugar de acogida para todos los que de una u otra forma (antes más, porque eran otros tiempos y otras circunstancias) hemos querido seguir vinculados y en contacto directo con la ciudad y con nuestros pueblos, no sólo por un sentimiento de añoranza sino también por esos deseos de reivindicación y de sentimiento de pertenencia identitaria a una tierra.
Por las circunstancias que nos están tocando vivir estos meses por culpa del coronavirus que nos asola y amenaza, no se podrá llevar a cabo la celebración de este evento hasta que la situación sanitaria lo permita. Pero lo celebraremos.
Mi vinculación con él se limita a los últimos 25 año, más o menos la cuarta parte de su dilatada existencia, y quiero dejar aquí constancia gráfica de alguno de los momentos inolvidables para mí como han sido la presentación de mis libros de FUENTEPIÑEL y de la Comunidad de Villa y Tierra de Fuentidueña (posteriormente reconocido con el premio Domingo de Soto 2008); los torneos de mus Juan Herrero Rubio, el entrañable Juanito el de la Taurina; la recepción con el actual obispo de Segovia, D. César Franco; las sucesivas presentaciones de libros, exposiciones de pintura, comidas, cenas, cocidos (gracias, Encarnita por tus desvelos y tu entrega al Centro, y a la acogida y al bienestar de sus socios) ,… en resumen momentos de vivir Segovia en Madrid, momentos de encuentros, reencuentros y de convivencia con tanta gente a la que nos une el amor hacia una tierra común.
Espero que más pronto que tarde podamos volver a reunirnos entre sus muros, y podamos brindar por el centenario, pero hasta que llegue ese día, de momento
#YoMeQuedoEnCasa ¡Y que no cunda el pánico, que nos reinventaremos y volveremos más fuertes!
¡Buen día