MANUEL POGGIO, CRONISTA OFICIAL DE SANTA CRUZ DE LA PALMA (TENERIFE), DESTACÓ DISTINTAS RECONSTRUCCIONES QUE SE HAN REALIZADO EN LA PENÍNSULA DE ESTRUCTURAS MILITARES DURANTE LOS ÚLTIMOS AÑOS
No queda nada de este edificio, al menos a simple vista, pero sí existe una especie de pulsión social por recuperar el Castillo de San Miguel, en la entrada sur de Santa Cruz de La Palma. Al menos así quedó patente en un debate que se celebró en el antiguo convento de San Francisco sobre su reconstrucción dentro de los actos organizados con motivo del 525 aniversario de la ciudad<, en el que participaron profesionales de distintos ámbitos, que coincidieron mayoritariamente en la idoneidad de recuperar el que fue el primer edificio militar de la isla, construido a principios del siglo XVI. Víctor Hernández Correa, técnico de Patrimonio del Ayuntamiento, se mostró a favor de la reconstrucción del pequeño castillo, “la primera edificación militar documentada en La Palma”. Se trataría de un gesto de “justicia social e histórica”. Restando además importancia a las críticas que reciben intervenciones de esta naturaleza que denominan “falso histórico”. Manuel Poggio, Cronista Oficial de Santa Cruz de La Palma (Tenerife), recordó que la capital palmera fue concebida en el siglo XVI como una ciudad marítima. Además destacó distintas reconstrucciones que se han realizado en la Península de estructuras militares durante los últimos años, que han tenido, en muchas ocasiones, un efecto dinamizador de la zona.
El ingeniero Fernando Lozano también se mostró a favor de la reconstrucción. “Defiendo que se haga, pero no tengo una opinión formada sobre cómo y dónde hacerlo. No necesariamente tiene que ser en el mismo lugar ni una réplica exacta”, argumentó en su exposición.
Asimismo, defendió que en el caso de la arquitectura, frente a otras expresiones artísticas como la pintura o la escultura, no existen los falsos históricos, ya que, a su juicio, “el ciclo creativo está abierto y se adapta a las necesidades del entorno”. Además destacó que la Unesco ha flexibilizado su criterio con respecto a las reconstrucciones.
El escultor y restaurador de arte Domingo Cabrera también se mostró favorable a la reconstrucción del Castillo de San Miguel, que presentó como “la asignatura pendiente” de Santa Cruz de La Palma. Así se refirió a varios ejemplos realizados en distintas ciudades peninsulares, como en Baena, Córdoba. También destacó la importancia de darle un nuevo uso.
Precisamente del uso como punto de información turístico habló Miguel Guerra, técnico del CIT Tedote, que trabaja en la llamada Casita de Cristal, que se encuentra enclavada en las proximidades de donde estaba elevado el Castillo. Guerra destacó que en 2005, cuando se inauguró la oficina, el turismo de cruceros era de 113 escalas y unos 123.000 turistas.
“Ahora, en 2017, fueron 153 escalas y recibimos el doble de cruceristas”. Ante esta cifra, la oficina se ha quedado pequeña, incómoda y cuenta con problemas de insonorización por el ruido del tráfico. “El Castillo nos permitiría tener una edificación más atractiva y generaría un nuevo punto de interés turístico y cultural en la ciudad”, añadió.
El artista José Alberto Cabrera, que ha diseñado todo un proyecto del frente marítimo de la ciudad, recuperando el carácter abierto al océano de Santa Cruz, se mostró también partidario de su reconstrucción, partiendo de los cimientos que deben conservarse de la edificación y recuperando otros elementos como la garita de Calcinas, los escudos y una réplica del cañón Escorpión.
Isabel Santos, restauradora del Cabildo, reivindicó su recuperación “para el disfrute de nuestra ciudad”, al igual que Fulgencio García, que abogó por darle un uso turístico y como sede de la asociación de recreación histórica Los Doce de su Majestad. Mauro Fernández, presidente de la delegación palmera de la Cámara de Comercio, abogó por crear una comisión de expertos para decidir cómo desarrollar este proyecto.
Fuente: https://diariodeavisos.elespanol.com/– DAVID SANZ