POR APULEYO SOTO, CRONISTA OFICIAL DE BRAOJOS DE LA SIERRA Y LA ACEBEDA (MADRID)
Ábrela de una vez, caballero Santiago, y asístela con tu patronazgo. Vuelve, vuelve, que hay tiempo, por el camino lácteo, antes que se deshaga en viejos califatos gallegos, andaluces, vasquistas, catalanos…
Coge la espada de la inteligencia, monta el caballo blanco y ayúdanos ahora para que no perdamos lo que tras ocho siglos a trancas y barrancas nos ganamos.
Está revuelto el Reino del Sexto Felipato y no hay quien sin disputa obtenga el mando. Corre que corre, vuela alto, sé nuestra salvación, estamos en tus manos.
Y es que ni Pedro, ni el pobre Pablo, ni el lince Alberto, ni el zorro rajoyano… saben qué hacer o hacernos al pueblo bajo. ¿Me oíste, Caballero? Pues ponte al tajo. España necesita no más ni menos que un milagro.