POR JOAQUÍN CARRILLO ESPINOSA, CRONISTA OFICIAL DE ULEA (MURCIA)
Con los mejores deseos se fueron programando las fiestas de Ulea, en honor de la Santa Cruz, por la comisión de festejos comandada por el concejal de festejos Valentín López Ramírez. Tanto a nivel cívico como religioso, desearon lo mejor para los uleanos y a cuantos nos acercáramos a Ulea para disfrutar del encanto de sus fiestas.
Como Cronista Oficial de Ulea, he procurado colaborar en cuanto se me ha solicitado y he podido. Además de mi acostumbrado artículo en el programa de fiestas, he difundido nuestras fiestas y las esencias del pueblo de Ulea, en los medios de comunicación regionales; tanto en prensa, radio y televisión, a instancias del Concejal de Festejos y de nuestro Regidor D. Víctor López Abenza. A pesar de qué, tanto en la televisión (7RM) como en la radio (Cadena Ser) tuve como contertulios y competidores a los portavoces de Caravaca y Abanilla-los otros dos municipios qué, junto a Ulea, veneran la Reliquia del Lignum Cruci, en la Región de Murcia. A pesar de ello, como digo, cuantos nos vieron y escucharon, quedaron impresionados al conocer la legendaria historia de Ulea, así como sus tradiciones.
Tras acabar la celebración de las fiestas, es el momento de hacer balance de las mismas y me congratulo de poder comunicar a todos los uleanos presentes y ausentes, del éxito de las mismas. Todo cuanto se había programado, tanto a nivel cívico como religioso, ha salido como estaba previsto, a pesar de qué, el día 29 de abril, por la noche, durante el V Encuentro de Folclore Infantil, en el que actuaban el Grupo Folclórico Villa de Alhama de Murcia y la Escuela Municipal de Folclore de Ulea que se celebró en la Plaza de la Constitución, nos cayó una ligera llovizna que al ser intermitente, nos gastó una mala pasada, a que acabamos todos un tanto calados por el agua, teniendo que finalizar el acto en el Centro Municipal de Mayores, de Ulea, en donde se le hizo entrega por orden del Alcalde de una placa conmemorativa al Presidente del Grupo folclórico de Alhama, por parte del Ayuntamiento de Ulea.
El día 1 de mayo, a mediodía, tuvo lugar una comida de hermandad, en La Replaceta. El día, soleado y con una temperatura idónea, al coincidir en domingo, atrajo a multitud de uleanos ausentes venidos de otras latitudes, para disfrutar con sus familiares, de tan entrañables fiestas patronales. Muchos de ellos vinieron acompañados de vecinos y amigos, sabedores de que serían bien acogidos.
El mismo día 1, por la tarde, tuvo lugar el multitudinario y colorido Bando de la Huerta, con su desfile de carrozas, resultando muy vistoso. Saliendo desde el paraje de la Capellanía, a la altura de la cooperativa agrícola de Ulea, las mozas y mozos uleanos, con sana algarabía y, ataviados con sus vestiduras huertanas, desfilaron por la calle principal de Ulea hasta llegar a la Plaza Mayor, en donde concluyeron con una fenomenal Ofrenda Floral.
En el mismo estrado, en donde tuvo lugar la ofrenda floral, las niñas y niños uleanos, nos deleitaron con bailes regionales dedicados a la Santa Cruz de Ulea, ante los aplausos efusivos de la multitudinaria y fervorosa ciudadanía por tan fausto acontecimiento.
La banda de música amenizó las fiestas por sus concurridas calles y callejuelas; además de acompañar al Lignum Cruci, durante su trayecto de ida y vuelta, desde la Iglesia Parroquial hasta el Templete del Henchidor. Por la tarde del día 3 de mayo, acompañó en la procesión de la Santa Cruz por las calles uleanas y administración del Viático a los enfermos impedidos en sus domicilios.
Todos los días festivos se practicaron juegos deportivos que hicieron las delicias de todos pero, en especial, de los pequeños y adolescentes del pueblo; muchos de ellos, acompañados por sus padres y familiares.
Llegado el día 3, festividad de la Santa Cruz, los uleanos, ataviados con nuestros mejores atuendos, acudimos en masa al baño de la Santa Cruz, en el Templete del paraje del Henchidor, lugar donde antaño se bañaba el Lignum Cruci en la acequia mayor, sobre la superficie de sus aguas. Ahora, la acequia está cubierta desde el año 1975, fecha en que se inauguró el Templete, siendo Alcalde de Ulea D. José Moreno Yepes. La salida de la Iglesia, como estaba programada, fue a las 11 de la mañana, bajo Palio portado por hombres y mujeres (1) y, tras un apoteósico castillo de fuegos artificiales, regresó a la Iglesia para presidir la misa mayor; en la que oficiaron ocho sacerdotes, capitaneados por el Párroco de la Iglesia de San Bartolomé, de Ulea, D. José López Martínez.
La misa, fue amenizada por la música y los cánticos de la Agrupación Coral Ulea Canta, dirigida magistralmente por la profesora de música; la uleana Mari Cruz López y López.
La ceremonia religiosa, presidida por el Párroco D. José López Martínez, acompañado por siete sacerdotes, entre los que se encontraban los uleanos Damián Abellán Cascales y José María Carrillo Espinosa, así como por D. José María Hidalgo, párroco de la Iglesia de San Bartolomé, de Ulea hace unos cuatro años. Durante la misa patronal, todos los sacerdotes fueron asistidos con gran meticulosidad por el acólito uleano Francisco Antomás. La homilía corrió a cargo del Rvdo. D. José María Tortosa Alarcón, quien nos disertó con una plática magistral cuyo epicentro, a mi modo de pensar, giró en torno de los valores divinos de los actos humanos. Para finalizar, como es costumbre ancestral, nos dieron a besar el Lignum Cruci a todos los asistentes. No puedo dejar de resaltar la gran afluencia de fieles a dicho acto religioso, a pesar de ser martes y, por tanto, día laboral. Tengo la impresión de qué, en este año 2016, nos hemos dado cita en dicho recinto eclesial, más número de fieles que en años anteriores.
A la salida de misa, en la plaza de la Constitución, la banda de música nos deleitó con gran número de piezas musicales, casi todas bailables y allí, en un día soleado, bailamos durante un buen rato; tanto jóvenes como personas mayores.
Los juegos populares causaron el delirio de los pequeños, casi todas las tardes y que, el día tres precedió a la procesión de la Santa Cruz y visita a los enfermos impedidos, a quienes se les administró el Viático.
Como colofón, el día tres, a las11 de la noche, actuó el grupo musical Discoteca Móvil, amenizando la finalización de las fiestas, hasta una hora prudente de la noche.
(1) El Palio siempre ha sido procesionado por los hombres, hasta que en una votación asamblearia, hace unos 20 años, se dictaminó que en lo sucesivo, las varas del Santo Palio serían portadas al 50% por hombres y mujeres y, así se sigue haciendo.