MIGUEL GALLEGO ZAPATA – CRONISTA DE LA VILLA DE SAN JAVIER (MURCIA)

Cuando menos lo esperábamos nos llega la triste noticia del fallecimiento de Antonia Escribano, viuda de Jesús Montesinos (Antonia La Confitera) “como ella prefería se le llamara. El próximo 15 de abril hubiera cumplido 92 años.

Perdemos a una gran mujer, una emprendedora de pro y una mujer amable y laboriosa donde las hubiere, una esposa, madre, abuela y bisabuela ejemplar, su simpatía y su don de gentes le acompañó en su larga vida.

Se cuenta que un buen día se subió en el Costa Azul que hacía la línea Alicante-Cartagena y cuando llegó a La Ribera vio cuál era su sitio, compró el edificio y más pronto que tarde, no era mujer de dejar las cosas para después, abrió la Confitería y Café Montesinos Escribano, donde florecieron y allí crió a sus tres hijos, más tarde a sus nietos y últimamente hasta sus bisnietos, una saga numerosa a la que educó en la laboriosidad.

Aquel, “Cornijal a orillas del Mar Menor, Santiago de la Ribera, lo mejor de lo mejor” nos ha deleitado con sus ricos pasteles y allí han venido a desayunar no solo de nuestro entorno, sino de toda la zona, varias generaciones que tuvieron aquello por su lugar de encuentro, pues su hijo Jesús, su actual director, hizo de aquello un lugar de información, donde junto a la críticas constructivas se enseñaba a querer a La Ribera.

Antonia era asidua a las Funciones de nuestro Santo Patrón, a las que venía acompañada de sus amigas. En estos tiempos difíciles en los que tanto necesitamos de personas emprendedoras, Antonia nos lega una lección permanente que no podemos olvidar.

Descanse en Paz nuestra gran amiga Antonia “La Confitera”,