TELDE INVITA A PASEAR POR SU SIGLO XVI A VECINOS Y TURISTAS • UN PROYECTO FINANCIADO POR EL GOBIERNO REGIONAL PROPONE CONVERTIR EN MUSEO LA CASA DE LOS SALL Y CREAR UNA RUTA POR LOS BARRIOS DE SAN JUAN Y SAN FRANCISCO, CON PANELES INFORMATIVOS Y CUATRO PUNTOS DE SALIDA
Mar 01 2019

EL PERO, APUNTADO POR EL CRONISTA OFICIAL DE TELDE, ANTONIO GONZÁLEZ PADRÓN, ES EL TRÁFICO Y LOS APARCAMIENTOS EN SAN FRANCISCO. ASEGURA QUE «SI NO SE SOLUCIONA ANTES ESTE ASUNTO, NADA SE PUEDE HACER

La alcaldesa accidental, el director general de Infraestructura Turística y el cronista oficial de Telde y vecinos durante la presentación del proyecto. / YAIZA SOCORRO

El municipio de Telde se postula como una suerte de retorno al pasado de Canarias con una ruta por los barrios históricos-artísticos de San Juan y San Gregorio, con parada de ocio en la Casa de los Sall y donde sus participantes podrán conocer cómo se produjo el paso de la sociedad aborigen a la europea después de la conquista del Archipiélago. Y la ciudad es, según Valentín Barroso, uno de los redactores junto a Consuelo Marrero del proyecto de musealización de la Casa Sall y su entorno, «un magnífico ejemplo porque conserva en estos dos barrios el 90 por ciento del diseño realizado por el ingeniero italiano Torriani a finales del siglo XVI, donde se puede observar a la perfección esta etapa de transformación social».

Doce puntos informativos, entre paneles e ilustraciones, una ruta que se inicia en la plaza de San Juan y continúa por la ermita de San Pedro Mártir, la escultura del Faycán, la calle San Pedro para conectar con la de Inés Chemida y desde ella por San Francisco hasta llegar a la Casa de los Sall y con regreso a la plaza de San Juan configuran el recorrido por el Telde de hace 400 años que han diseñado Barroso y Marrero para que vecinos, canarios y turistas foráneos conozcan la evolución socioeconómica y cultural del Archipiélago por un entretenido paseo por dos de las joyas del patrimonio histórico de la ciudad.

Y lo más importante, que no pierda el pulso y se muera por la marcha del CAE a El Calero, como argumenta Gloria Cabrera, alcaldesa accidental y concejala de Patrimonio, además de cumplir «una demanda casi a gritos de la ciudadanía». Su realización, no obstante, está sujeta al cambio de uso del edificio, previsto para un conservatorio y cuyocambio supondrá unos trámites que pueden durar seis meses.

El pero, apuntado por el cronista oficial de Telde, Antonio González Padrón, es el tráfico y los aparcamientos en San Francisco. Asegura que «si no se soluciona antes este asunto, nada se puede hacer porque ya hemos visto las dificultades para pasear por el tránsito de los vehículos, que obligan a apartarse a los transeúntes o los aparcamientos, que hacen prácticamente imposible sacar una buena foto de la belleza del barrio».

Además de esta situación, donde se propone valentía para acometer cómo resolverla, varios son los retos que se marcan en el proyecto para lograr el propósito de exhibir al conjunto monumental en una ciudad del siglo XVI por la que pasear por sus principales hitos. Uno de ellos y, para empezar, se debe ordenar todo su entorno, no solo el futuro museo. Barroso apunta la creación de cuatro lanzaderas desde donde los vecinos y turistas puedan acceder a la ruta, «que se conozca la zona».

Así, El Cubillo, la casa museo León y Castillo, la plaza de San Juan y la zona de los colegios serán las salidas de los excursionistas hacia el barrio de San Francisco y en cada una de ellas, además de los instalados en el recorrido, habrá paneles informativos de distinto diseño, en los que no solo se explicarán las características del lugar, sino de otras zonas de Telde relacionadas con los temas.

Valentín Barroso y Consuelo Marrero apuestan por una visión de un Telde de espacios diáfanos, información a cada paso, la recuperación de hitos olvidados o desconocidos durante el itinerario que guiará a los participantes al museo. Allí, en sus diferentes salas se podrá contemplar el rápido cambio de la sociedad aborigen a la europea, «con la presencia de extranjeros ya en el año 1550 y una gran cantidad de oficios en la ciudad» y modificaciones en otros ámbitos como la vestimenta, economía y religión entre la población».

El proyecto contará con una inversión de 378.000 euros que aportará, según anunció Héctor Suárez, director general de Infraestructura Turística del Gobierno de Canarias durante la presentación del proyecto en las Casas Consistoriales. Suárez recordó que su departamento ya ha invertido 400.000 euros en obras de mejora y compra de mobiliario para este inmueble ubicado en pleno centro de San Francisco, al tiempo que confirmó sendos desembolsos de 400.000 euros para la rehabilitación de la Casa de la Condesa y la Noria de Jinámar.

Gloria Cabrera insistió en que «no se trata de elaborar estudios y proyectos para luego dejarlos en el cajón, hay que lograr la ficha financiera y ejecutarlos». Argumentó, además, que «hemos trabajado todo este tiempo en la conservación del rico patrimonio del municipio, pero al no contar con recursos propios hemos tenido que acudir a otras administraciones públicas. La previsión, según Suárez, es que se apruebe antes de mayo y que el proyecto comience este mismo año.

La reflexión de Cabrera sobre planes y proyectos que nunca salieron a la luz recuerda precisamente lo ocurrido con las distintas ideas contempladas para la Casa de los Sall, donde había previsto un conservatorio que nunca se hizo, entre otras ideas.

Fuente: https://www.laprovincia.es/ – Pedro Hernández

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