POR SANTIAGO IZQUIERDO GONZÁLEZ, CRONISTA OFICIAL DE SAN SEBASTIÁN DE LOS REYES (MADRID).
Hoy nos ha surgido un nuevo barrio en Sanse, en una ladera que vadea desde la Cañada de Matapiñonera hasta el Cerro Helecho en los límites con Alcobendas, como ya mucho habréis acertado que me estoy refiriendo al de Tempranales.
Tempranales
En alguna ocasión ya he escrito y comentado que este paraje recibe ese nombre debido a las numerosas plantaciones de viñas que había en este lugar, propicio para que fuesen de uva temprana, como consecuencia de su ubicación en una ladera mirando al saliente y al mediodía, lo que hace que sus más horas de sol contribuya a que se adapte este tipo de viñedo de fruto temprano. En algunas cartografías también encontramos dentro de él otro paraje con la denominación de Fuente Guindas.
En el libro que escribí sobre el Catastro del Marqués de la Ensenada ya mencioné que nuestro pueblo tenía una gran superficie de su término municipal ocupado por viñedo, hoy prácticamente desaparecido, tan sólo nos quedan algunas viñas en la margen izquierda del Arroyo de los Quiñones, en los parajes denominados Robliza Baja y Las Terreras, ya muy cerca del río Jarama. Hasta hace pocos años también existían bastantes viñas en la Fuente Nueva y Los Jaenales, pero con la construcción de las nuevas pistas del aeropuerto, la R-2 y la M-50 se las han llevado por delante.
Volviendo a Los Tempranales, es la última urbanización surgida en nuestra localidad y que aún se está desarrollando, pues la crisis la afectó seriamente, sí puedo deciros que era uno de los terrenos “menos apetecibles” para la agricultura, pues es un suelo poco fértil para la siembra de cereales, de hecho como ya he comentado anteriormente que lo que se daba bien era el viñedo, pero con la filoxera éste desapareció y se optó por roturarlo. El acceso a estos parajes se hacía a través del Camino de Valdelasfuentes.
Valdelasfuentes
Con este nombre de Valdelasfuentes encontramos un amplio paraje que abarca incluso parte del vecino término municipal de Alcobendas, y que con este nombre han “bautizado” a uno de sus principales barrios.
Este paraje está conformado por un suave valle que se forma a ambas márgenes del Arroyo del mismo nombre. El origen del nombre de Valdelasfuentes lo debemos encontrar en los diferentes manantiales y arroyos que existían en sus laderas como los ya citados Tempranales y Fuente Guindas.
Este camino en su origen tenía su inicio en la actual Plaza de Andrés Caballero Frutos, plaza en que se alza el Monumento al Encierro, lugar que los “apodacas* llamaban las Eras de Arriba, junto al Cerro de Santa Bárbara. De aquí partían también otros caminos como era el de los Barrancos, el de En medio, el de Navarrondán y el Paredón ó Paredones que con ambas denominaciones lo encontramos, pero en algún momento del desarrollo que se originó en sus inmediaciones a los que allí levantaron sus casas no les “encajaba” lo de Paredón y lo empezaron a denominar Camino del Praderón y por tanto el barrio tomó este nombre y nadie les ha corregido.
El Cerro de Santa Bárbara, hoy día pasa desapercibido y desfigurado entre las Avenidas de Baunatal y Valdelasfuentes, tan sólo nos queda como testigo la calle de Santa Bárbara que une las dos citadas avenidas. En su cima existía un vértice o punto geodésico que indicaba su altitud. Este cerro era el segundo en altura de nuestro término municipal, tras el Cerro del Toro que se encuentra en la Urbanización Ciudalcampo.
El Camino de Valdelasfuentes, es el más meridional de los caminos citados y bordeaba el Cerro de Santa Bárbara por su ladera este, y se llegaba hasta el Cerro del Tambor y de aquí descendía hacía al arroyo que tomaba el nombre del paraje y que aguas abajo pasaba a denominarse Arroyo Valconejero.
Este Camino debió tener cierta importancia en un pasado, pues es el que se tomaba no sólo para acceder a las huertas y viñedos que había en aquel lugar, sino que también sería por el que transitaban todos los vecinos que iban hacía las fincas de Valdelamasa y al Monte de El Pardo, además que era el camino que conducía a Colmenar Viejo, hasta hace unos años cabecera de comarca, pues es donde estaban ubicados el Juzgado y el Registro de la Propiedad, lo que hacía que este camino fuese bastante concurrido, y que una vez atravesado el arroyo tomaba el nombre de Camino de Colmenar.
Este nombre de Valdelasfuentes ya aparece mencionado en un acta del Concejo de Madrid de 14 de febrero de 1494.
Cerro del Tambor
Se desconoce el origen del nombre de este cerro, aunque en la actualidad se encuentra un tanto desdibujado dentro de la trama urbana, le podemos ubicar en las proximidades de la Plaza del Voluntariado y bordeado por su cara norte por el Camino de Valdelasfuentes.
Si hacemos una abstracción y no le imaginamos sin edificaciones, podríamos ver cierto parecido a la forma de un tambor, con su cima aplanada y con unas laderas muy pronunciadas desde el Camino de los Barrancos, hoy la Avda. Rosa Luxemburgo, hay que saber que esta vía se encuentra hoy muy elevada con respecto a como estaba antiguamente. Otro tanto se podía apreciar desde la ladera sureste que encaraba el límite con Alcobendas, actualmente el Barrio de La Zaporra, y otro tanto ocurría si se oteaba desde el arroyo de Valdelasfuentes. En su ladera norte nacía el Arroyo Jorge, éste hoy soterrado y que vertía sus aguas en el Arroyo de los Quiñones, éste toma este nombre a partir de juntarse las aguas de los arroyos de Valconejero y de la Dehesa.
Este cuidado parque que pueden disfrutarlo por igual los vecinos de Sanse que los de Alcobendas y en su centro hay un monolito con una placa que dice lo siguiente:
Parque del tambor
Realizado por alumnos y profesores de las Escuelas Taller CERRO DEL BAILE y FUENTEGUINDAS y que se dedica al recuerdo de Dª Esperanza Abad y Dª Esperanza Jiménez benefactoras de San Sebastián de los Reyes.
Es de destacar el recuerdo a esa excelsa mujer que fue Esperanza Abad Giménez, por sus muchas obras benéficas que hay repartidas por todo Sanse. En el primer libro “Episodios de la Historia de Sanse” hay un episodio dedicado a su vida y sus obras.
FUENTE: CRONISTA