POR JOAQUÍN CARRILLO ESPINOSA, CRONISTA OFICIAL DE ULEA (MURCIA)
En la década de los años 1950 a 1960, irrumpió con fuerza el transporte en vehículos rodados y, como las calles de Ulea que fueron erigidas a partir del año 1492, tras la edificación del Ayuntamiento, en el sitio de la Cruz eran estrechas, con esquinas salientes y balcones prominentes que al paso de dichos vehículos, en un principio camionetas de cuatro ruedas, tropezaban con todos los salientes provocando atascos y desperfectos en las calles y viviendas.
Pues bien, el Alcalde de Ulea y su equipo de Gestores, comenzaron una campaña de «eliminación de esquinas y balcones salientes» para dar paso por las calles de Ulea a los vehículos rodados.
D. José Carrillo Hita, Alcalde de Ulea, comenzó a dar ejemplo y limó la esquina de su casa en la calle O’Donnell. Con posterioridad el Concejal y Primer Teniente Alcalde D. José Yepes Herrera, hizo un estudio de todos «los tropezones» de las calles de Ulea y, rápidamente; tan pronto como tenían dinero, comenzaron a darle amplitud a las calles uleanas.
En la Sesión Ordinaria del día 27 de mayo de 1951, el Sr. Alcalde, en uso de las facultades que el Ayuntamiento de Ulea le tiene conferidas, se llevó a cabo de forma amistosa, la expropiación de la casa de la Señora Doña Segunda Molina Palazón (la Segundina del Manco), por la cantidad de 2,000 pesetas y un solar en la calle Nueva, que hace esquina en la avenida en la que se van a construir las casas de los Maestros.
Con ello se contribuye a extinguir totalmente, el peligro que acarrean las sucesivas avenidas torrenciales del llamado «Reguerón de la Pedrera».
El solar, concedido de forma gratuita, mide 9´50 por 14 metros que al ser construidas será propiedad de «la Tía Segundina» (la del Manco).
D. José Carrillo, Alcalde de Ulea, sigue quitando esquinas en las calles del pueblo; sobre todo, en la Calle Mayor. Tanto empeño le puso que, en el pueblo, le empezaron a llamar «el Alcalde Quita Esquinas».