POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)
Cuéntase que en cierta ocasión un turista, al llegar a un pequeño pueblo de costa, se interesó por algún peluquero (antes se decía «barberu») de cierta experiencia y arte.
La respuesta del lugareño fue contundente: «¡Ay, señor; equí lo que hay ye un CURIOSU que corta el pelu!».
Pues, ¡quién lo diría! , esta es la opinión que muchas gentes, todas de buena fe, tienen acerca de los Cronistas Oficiales: somos unos «curiuosos», unos «aficionados», que sabemos «cosuques» del pueblo… y poco más.
Para hacer estudios de garantía hay que recurrir a «investigadores de fuera» que «esos sí que estudiaron y saben mucho».
Bueno, bueno… Pues , verán, hurgando entre mis papeles en desorden masivo , archivos medianamente ordenados y mi pequeña biblioteca de unos 5 000 ejemplares, encontré este plano de la ensenada de Lastres, obra de Miguel de La Puente (año 1785), cuyo original se conserva en el Archivo del Museo Naval, de Madrid.
La copia que reproduzco es defectuosa, pero si la amplían a pantalla completa observarán que en las notas que completan el plano se citan: «La Punta y piedra de VISTA ALEGRE y la PUNTA Y PIEDRA DE LA GRELA.
En la nota marginal Nº 8 se lee: «Se hallan en esta ensenada dos parajes donde acostumbran los naturales fondearse las embarcaciones, de las cuales el señalado con la letra J es preferido para con NE, montarse a Cabo de Lastres. Sus marcas son por una parte Cotariello puesto por las piedras del Escano, más inmediato a la punta del mismo nombre; y por la otra, LA PUNTA QUE ESTÁ AL SUR DE LA GRELA, puesta por la Calzada del camino que el ARENAL EL MISMO NOMBRE sigue a Colunga, la que no puede ser equivicada con otra».
Una duda; ¿Fue un error del Sr. La Puente escribir «LA GRELA» en vez de LA «GRIEGA»; o es La GRIEGA una deformación fonética de GRELA?
Arenal de San Juan y de Vista Alegre, Playa de San Juan y playa de Colunga, Playa o Arenal de La Griega ; pedreru de Llastres, pedreru de San Juan, pedreru de Huerres (Buerres o Güerres), Penote, Pegollín, Saltu la Muyer, Peña La Salmoria…
Arenales y pedreros de nuestra niñez y de nuestra juventud que testimonia Xuan Xosé Sánchez Vicente:
«Enantes, tres la herba, blandiu y secu sable,
onde el desnudu pie funde y con esfuerzu avanza.
Sucu dempués y , llueu, dorada fariña de maiz,
onde la mar borda en zig-zag la greca´l so fuxir
entre arrume a salitre y ocle vivo.
Llienta, llarga llanura de dorada fariña
que se prolonga en sal, n´azul y n´horizonte
y onde´l pie ye breve escatafín que nagua l´agua…»
Pedreros de San Juan y de Huerres, riqueza de llámpares (no digan «llámparas»), que son lapas, para pprepararlas en salsa verde.
«Pesquen», a la media rompiente de la bajamar, un kilín abundante de llámpares bien mojadines con el agua del oleaje.-Lávenlas muy bien en varias aguas con un poco de sal hasta que sueltes toda su arenilla.
Sabrán que están bien limpias si, abiertas dos o tres piezas al microondas durante unos segundos, ya no «ruquen».
Preparen según costumbre una salsa verde con aceite, ajo, perejil abundante, una guindilla si gusta, y un poco de harina desleída en caldo de pescado. Ha de resultar una salsa ligeramente espesa. Aromaticenla con un vasito de vino blanco (Para Colunga aconsejo el de SANCAR).
Dispongan les llámpares (con su concha) en una cazuela de barro, cúbranlas con la salsa verde y pongan al fuego hasta que «la chicha» se desprenda de la cáscara.
Sirvanlas de inmediato muy calientes. Cómanlas «a deu» (la chicha, no la concha), chupando su salsa y mojando con pan más salsa.
Y una buena sidra «pa con tou».