POR ANTONIO BARRANTES LOZANO, CRONISTA OFICIAL DE VILLANUEVA DE LA SERENA (BADAJOZ).
Dentro atmósfera de disgregación que viene sufriendo la sociedad española, que se hable de la fusión de dos entidades locales de cierto peso demográfico, social y económico, viene ser como una bocanada de aire fresco dentro del ambiente enrarecido de nuestra realidad por tantos “ismos” al uso.
Por ello no nos extraña el interés despertado por la prensa nacional en todos sus ámbitos: TV, Prensa y Radio. ¿Por qué, si el proceso ni es original ni es nuevo? Quizá por ambas cosas: en España es original porque nunca se ha dado entre dos entidades de cierto rango demográfico, sólo un caso en Galicia, entre dos poblaciones que no llegan a 5.000 habitantes, pero no es original porque este proceso en el que estamos inmersos, es viejo en Europa. El Catedrático de Derecho Constitucional, D. David Ortega, en el artículo publicado en el Diario El Mundo el 29 de octubre de 2021 nos dice: “Este país nuestro es un poco raro, pues lo que es excepcional en España, la fusión de municipios, es lo normal o, mejor dicho, muy mayoritario en Europa.., La reducción municipal europea ha sido drástica. Suecia desde 1952 pasó de 2.498 municipios a tan solo 278 en 1974; Alemania entre 1965 y 1978 pasó de 24.371 a 8.514. Reino Unido entre 1974/75 bajó de 1.844 a 434. Dinamarca en 1970 redujo su número de 1.300 a 275. Bélgica en 1971 hizo lo propio, pasando de 2.359 a 589 municipios. En fin, Austria, Noruega, Países Bajos, Grecia, Italia, Portugal, han seguido una línea similar”
Y ni es nuevo, en el tiempo se han sucedido múltiples intentos, ni parte de la nada, tiene su base jurídica en la “Ley de racionalización y sostenibilidad” de 27 de diciembre de 2013, en la que: “que por primera vez se introducen medidas concretas para fomentar la fusión voluntaria de municipios de forma que se potencie a los municipios que se fusionan ya que contribuyen a racionalizar sus estructuras y superar la atomización del mapa municipal”… “Entre estas medidas de incentivo se encuentran el incremento de su financiación, la preferencia en la asignación de planes de cooperación local o de subvenciones, o la dispensa en la prestación de nuevos servicios obligatorios como consecuencia del aumento poblacional… …estas medidas de fusiones municipales incentivadas, que encuentran respaldo en la más reciente jurisprudencia constitucional, STC 103/2013, de 25 de abril, supondrán, en definitiva, que los municipios fusionados percibirán un aumento de la financiación en la medida en que los municipios de menor población recibirán menos financiación”.
Otra cosa es que en nuestro País se haya sido reacio a ello.
El deseo de unión Villanueva-D. Benito, es una aspiración latente desde mediados del siglo XX; todos los Ayuntamientos que en uno y otro municipio han sido, han intentado siempre gestos de aproximación que, por razones que se nos escapan, nunca pasaron de meros propósitos.
Ahora parece ser que sí. Comenzar el procedimiento ha sido un acto de voluntad de los Ayuntamientos actuales fundamentado en los exhaustivos estudios de los profesores de la UEX del Departamento de Ciencias Económicas y Empresariales, D. Julián Ramallo Hernández, D. Pedro Rivero Nieto y D. Francisco Javier Miranda González, que concluyen en los documentos “Análisis de competitividad de ciudades y polos de desarrollo en la Provincia de Badajoz” que viene a ser como la guía de autoridad donde se fundamentan las razones económicas que alumbran el “Proyecto de Fusión de ambas localidades” donde se pormenorizan los procedimientos y tiempos a seguir.
Esta iniciativa de fusión fundamentada, ha sido avalada por las autoridades políticas de la región representadas en la Asamblea Autonómica, los ex Presidentes Autonómicos, la Diputación Provincial, el Gobierno Central y, por unanimidad, por los distintos plenos de ambas localidades. El objetivo, al que legalmente podría darse término por mayoría de las Corporaciones municipales, se le quiere dotar de respaldo social por lo que se ha propuesto una consulta popular. Al quedar esto fuera de las prerrogativas municipales, tiene que ser el Gobierno quien lo autorice. Venia que concede el Consejo de Ministros del 8 de noviembre.
Para la consulta en la que dombenitenses y villanovenses expresarán su opinión sobre la fusión de los dos municipios para crear la tercera ciudad más poblada de Extremadura, se ha fijado la fecha del 20 de febrero de 2022.
Ahora el tiempo es nuestro, es tiempo de olvidar caprichos, vilezas y prejuicios tribales carentes de argumentos.
El procedimiento ha sido impecable. La unidad política, tan poco habitual en nuestra historia democrática, representa el mejor aval en la credibilidad del proceso. Opiniones de rango y el rigor científico de los especialistas de la UEX nos asegura un camino cualitativo y nos cuantifica la bondad del proceso con datos económicos más que deseables y el soporte jurídico que nos da la referida ley de Sostenibilidad y Racionalidad municipal nos da seguridad y fija los criterios de convergencia pormenorizados en el “Proyecto de Fusión de los municipios de D. Benito y Villanueva de la Serena”. que dejan el camino expedito a las tantas veces intentados procesos de fusión.
Nos toca a nosotros tomar la palabra. No olvidemos que Ortega y Gasett nos decía que los particularismos son el principal problema de la vertebración de las naciones. Con actitudes egocéntricas se achican los horizontes. Olvidemos nuestras particularidades. Con la fusión no se trata de anular los caracteres vitales propios, sino buscar la articulación de dos colectividades distintas en una unidad superior en la que ganaremos todos.
A partir de la fecha referida del 20 de febrero, si los ciudadanos damos nuestro consentimiento, se dará paso al proceso transitorio con las actuaciones previstas en el artículo 13 de la Ley de 2013, y temporizado en el ya referido Proyecto, a fin de hacer converger y homogeneizar aspectos como; territorio, fiscalidad, presupuesto, ordenación urbana, personal, capital mobiliario…
Este periodo transitorio estaba previsto para el primer trimestre de 2031, pero que debido a la similitud fiscal, administrativa y escaso o nulo endeudamiento de ambos Ayuntamientos, se prevé adelantar y que el presupuesto del nuevo municipio nacido de la fusión para 2028, se haga por la primera corporación salida de las urnas en las elecciones de 2027.
No podemos dejar de pasar la oportunidad de ser la tercera ciudad extremeña, con más de 63.000 habitantes, con un término municipal de más de 700 km2, pasar a ser el primer polo económico a nivel agrícola-ganadero, el primer polo económico regional a nivel industrial, incrementando para la zona su capacidad reivindicativa industrial, social, cultural y universitaria, lo que ayuda a fijar población y da oportunidades a nuestros jóvenes, al pasar a ser segunda potencia económica de nuestra comunidad y foco de atracción para inversiones estatales y particulares.
Somos nosotros, los que nos iremos siendo serones y calabazones, los que tenemos la palabra el próximo 20 de febrero, pero serán nuestros hijos, nuestros nietos, quienes vivan una nueva realidad; se nos pide amplitud de miras, seamos valientes y generosos, que nuestra cicatería y fobia no oculten el nuevo horizonte, ni castren este sugestivo proyecto de futuro. Así lo pienso.
FUENTE: CRONISTA