UNA FUENTE HISTÓRICA DE CÁCERES LLENA DE BASURA
LAS LAVANDERAS RECOGIAN LA ROPA LOS LUNES PARA LAVARLAS SEGÚN EL CRONISTA OFICIAL DE CÁCERES, FERNANDO JIMENEZ BERROCAL
En el mes de enero del año 2016 se colocaron en distintos puntos de la ciudad de Cáceres un total de 26 paneles informativos, con los que se trataba de dar a conocer y potenciar siete rutas para senderistas en el entorno de Cáceres, prácticamente sin salir del caso urbano.
En el barrio de la Madrila, al comienzo de la calle José Luis Cotallo, se encuentra uno de estos paneles que anima a recorrer la ruta número siete, la que transcurre por Aguas Vivas y el Olivar Chico de los Frailes.
Son seis kilómetros, y se informa al interesado que al hacer la ruta se podrán visitar tres fuentes tradicionales de Cáceres: la de la Madrila, la de Aguas Vivas y la de Hinche.
Cuando el caminante llegue a la fuente de Hinche, en la zona de lo que hoy se conoce como R-66, no se encontrará, sin embargo, con un lugar hermoso como dice el panel, sino que descubrirá algo próximo a un estercolero.
El entorno de la fuente, que es un lugar muy visitado por caminantes que también pasean por la cercana Ronda Norte, está totalmente degradado en la actualidad. El agua en la fuente se halla estancada y allí se acumula la basura de latas, plásticos y botellas, entre otros desperdicios visibles.
Tenía 20 pilas para lavar y abrevar al ganado, pero están tapadas por la hojarasca y no se ven.
Los vecinos de las cercanas urbanizaciones se quejan del deterioro de esta zona, que forma parte de una de las zonzas con agua más tradicionales de Cáceres.
Esta fuente pertenece al arroyo de Aguas Vivas, que está al oeste de la ciudad, en la vaguada de la Sierrilla.
En diversos lugares que promocionan el turismo en Cáceres, se indica que si antes el arroyo de Aguas Vivas tenía diversas fuentes, en la actualidad soló quedan tres: Una es precisamente la Fuente de Aguas Vivas que fue construida en el siglo XV y dio nombre al barrio en el que se encuentra, junto a la Plaza de Toros; fue restaurada en el año 1991 por la escuela taller de la Universidad Popular.
Otra es la Fuente Bárbara, de estructura abovedada, que tenía varias pilas para lavar, y que en 1995 también fue arreglada por la Universidad Popular.
La tercera es Fuente Hinche, de cuyo tamaño da idea el dato de que tenía 20 pilas para lavar ropa y abrevaderos para el ganado. Las pilas actualmente no se ven, aunque los vecinos aseguran que están tapadas por la acumulación de hojarasca y los restos de poda.
Es la fuente, sin duda, más castigada por el abandono desde hace mucho tiempo. Ya en 1984 se denunció su situación precaria.
En el libro ‘Aprender desde el recuerdo’, editado en 1997 por la Universidad Popular cacereña para que no se olvidara la vida de las lavanderas, se destaca la importancia de Fuente Hinche, que era una de las más utilizada por estas mujeres junto a las de Fuente Concejo, Fuente Rocha, Fuente Fría, Beltrán y La Madrila.
Según se explica en el libro del cronista oficial e historiador Fernando Jiménez Berrocal y Concepción Dochao, las lavanderas recogían en las casas la ropa para lavar los lunes, y a lo largo de toda la semana acudían a los lavaderos, públicos o privados que existían en la ciudad, «algunos de ellos muy alejados del casco urbano como Las Minas de Valdeflores, en la umbría de la Montaña; Beltrán, en la carretera vieja del Casar de Cáceres; Hinche, junto al Parque del Príncipe; La Madrila, situada en la finca del mismo nombre; y El Corcho, en la carretera que va al Santuario de la Montaña».
En otras épocas se decía que las aguas de Hinche eran medicinales, y la gente acudía a llenar garrafas, pero ahora todo aquello es un basurero. Sergio Lorenzo
Fuente: http://www.hoy.es/caceres/fuente-historica-llena-20180429002121-ntvo.html
