EL ALCALDE ANUNCIÓ QUE LA ESCUELA MUNICIPAL DE MÚSICA LLEVARÁ EL NOMBRE DEL SACERDOTE Y COMPOSITOR
Villanueva de la Serena no falló a la cita con uno de sus hijos más queridos. Tal es el cariño que se le profesa a don Antonio, que su pueblo, a través del Ayuntamiento, prefirió rendirle un cálido y emotivo homenaje en vida. De esta forma, muchos amigos y vecinos tuvieron la oportunidad de agradecerle en persona la huella imborrable que su presencia ha dejado en sus vidas.
Fue en la noche del sábado, en el teatro Las Vegas, que se vistió de gala para hacer los honores a este sacerdote, compositor musical y director de la Coral Villanovense durante casi cuatro décadas. No es de extrañar, por tanto, que una vez que don Antonio Guisado pudo tener delante a aquel auditorio repleto de gente, sólo tuviera palabras de agradecimiento: «Estoy muy emocionado por tanto amor y tanto cariño».
Una emoción, que luego se transformó en orgullo «de ser extremeño y de ser villanovense» y que, como no podía ser menos, se acabó diluyendo en una de sus pasiones: la música. Primero, entonando unas graciosas coplillas de la canción popular ‘Tráeme Mariquilla el peine’ y, como broche final, dirigiendo a su queridísima coral.
El acto fue sencillo, a imagen y semejanza del homenajeado. Fue la periodista villanovense Nieves Moreno la que se encargó de ir hilvanando las intervenciones, salpicadas con las interpretaciones al piano de Eduardo Sánchez.
El cronista de Villanueva, Antonio Barrantes, le regaló unos versos de Fray Luis de León. El párroco de San Francisco, Felipe Domínguez, definió a don Antonio como un hombre «sobrio y austero, que necesita pocas cosas, aunque las que necesita las requiere de forma intensa», como su fidelidad al ministerio sacerdotal y su pasión por la música.
Pepe Cardenal, como exconcejal de Cultura y exintegrante de la coral, reconoció que gracias a este «hombre humilde, con tesón, generoso y comprometido», pudo vivir experiencias vitales para el recuerdo. Así, rememoró aquella en Cabeza del Buey en la que, cantando con la coral y preso del despiste, se arrancó con un solo tratando de imitar que lo cantaba en ruso.
Justi Segador también subió al escenario para agradecerle a don Antonio su labor al frente de la Juventud Obrera Cristiana (JOC) en la que tanto se implicó. «Con él aprendimos muchos valores y luchó por convertirnos en buenas personas».
Antonio Ramiro, adjunto al archivo y biblioteca del Real Monasterio de Guadalupe, incidió en la cualidad de «peregrino incansable de la ‘Morenita’» de don Antonio y en su querencia por aquel rincón de Las Villuercas, a dónde solía retirarse durante largas temporadas para componer. Por su parte, José Valadés, presidente de la Federación Extremeña de Corales, afirmó que nadie se puede referir a la música coral en Extremadura sin nombrar a don Antonio «en mayúsculas».
«Sembrador»
Manuel Guisado, actual director de Arte Vocal y curtido en la Coral Villanovense, añadió una cualidad más al homenajeado, la de «sembrador». Y junto con su amigo Ángel Gil improvisaron un dueto para interpretar ‘Tú que brillas en el cielo’, imitando así aquellos dúos que protagonizaban don Antonio y Francisco el Sacristán cuando iban en el autobús a cualquier concierto.
Nicolasa Alonso y Antonio Lozano, miembros actuales de la coral, agradecieron al maestro que les hiciera «amar la música». El campanariense Antonio Ventura Díaz, exvicepresidente de la Junta, valoró el papel de don Antonio «en la promoción de la música popular de Extremadura», al tiempo que recordó a otro campanariense, el Padre Sebastián García, como nexo de unión entre ambos y con Guadalupe.
No obstante, las que resumieron mejor el sentimiento hacia don Antonio fueron Antonia Tejeda, compañera en la Asociación Amigos de la Coral y Folklore Villanovense, y Rosi, su sobrina: «Todos le queremos muchísimo», sentenciaron.
El Alcalde, Miguel Ángel Gallardo, aprovechó su intervención para anunciar que la escuela municipal de música llevará el nombre de Antonio Guisado. Todo sea para que esa «sonrisa amable y llena de ternura», como apuntó Nieves Moreno, no se borre de su rostro.
Fuente: http://www.hoy.es/ – Fran Horrillo