POR MANUEL GARCÍA CIENFUEGOS, CRONISTA OFICIAL DE MONTIJO Y LOBÓN (BADAJOZ)
Ayer estuve en Lobón visitando el yacimiento acompañado por el alcalde, Roberto Romero Gragera. La arqueóloga María Teresa Carrasco Gutiérrez, directora del Taller Auxiliar de Arqueología de la Escuela Profesional “El Trampín”, nos explicó las últimas novedades sobre este yacimiento. El conjunto en el que se interviene albergó a finales de los s. XV y parte del XVI, el Hospital de Santiago, fundado por don Diego de Alvarado, comendador de Lobón, en el que construyó una capilla para enterrarse en ella y sus descendientes a los pies del altar. En 1562, un nieto del comendador santiaguista cede los derechos a doña Elvira de Figueroa, señora de Lobón, para que construya junto a su iglesia un convento franciscano en la rama de observantes para la educación y formación de los loboneros, siendo también Colegio de Artes para la provincia franciscana de San Miguel.
Recientemente desde la Alcaldía de Lobón se ha informado de una nueva concesión por importe de 292.444 euros para la formación y práctica de quince alumnos que deseen formarse y tener opciones laborales con certificación acreditada en la modalidad de auxiliar de labores en albañilería y arqueología. Con esta concesión se alcanza la cuarta campaña de excavaciones.
La Escuela Taller El Trampín es un proyecto de arqueología y restauración del patrimonio histórico y natural del entorno del paraje “Fuente de María Cristina” y convento franciscano de Santiago. La Escuela Profesional “El Trampín” cuenta con la financiación de la Junta de Extremadura, Consejería de Educación y Empleo, Servicio Extremeño Público de Empleo y Ayuntamiento de Lobón. Gracias a ello se está recuperando el patrimonio histórico de Lobón.
En 2014 decía en mi obra “Lobón en su historia”, que había un montón de escombros porque el edificio se había desangrado. Apenas eran visibles las ruinas de algún paredón y escasos restos de la iglesia, que continúan en su lenta agonía cayéndose y enterrando lo que fue centro de espiritualidad, escuela de artes y cultura, sin que nadie acudiera a socorrerlo. Hoy, afortunadamente sabemos más sobre este monumento gracias a las gestiones que a lo largo de estos años se han hecho desde la Alcaldía de Lobón, sensible con la historia y el pasado del “Balcón de Extremadura”.