Los Armaos en mi recuerdo…y otras cosas, ese fuel el titulo de la interesante conferencia ofrecida por el Cronista Oficial de Jumilla, Antonio Verdú Fernández. Un repaso por los recuerdos que el ponente tiene sobre años comprendidos en la mitad del siglo pasado, que son los que vivió, Verdú Fernández, en su etapa de niño y adolescente.
Comenzó con una publicación del acta municipal de la llegada de D. Roque Molera Rivera, al municipio de Jumilla en el año 1836, siendo alcalde de la villa, Francisco Jiménez. También aporto un archivo visual de la primera página del primer libro de actas de la Hermandad de Jesús Nazareno, antecesora de la actual Hermandad del Santísimo Cristo Amarrado a la Columna.
Los recuerdos de su niñez que se le agolpan ahora, en el momento de realizar la ponencia, fueron expuestos en la cita. El paso de las procesiones en la Calle Pasos Altos y en la Calle Gracia, donde sus padres le llevaban en los años 40 a ver las procesiones, principalmente recuerdo grato tiene de la del Jueves Santo.
Sus recuerdos vividos en la fragua que su padre regentaba junto a la antigua carpintería de la Iglesia de Santiago, hoy desaparecida, donde se preparaban los Armaos para participar en todos los actos que recogen los estatutos de la Hermandad. Sus experiencias como Monaguillo de Santiago. La iluminación especial de Semana Santa, que instalaba “el Soria”, fue otro de los recuerdos que aportó a la conferencia, asi como los distintos aportes gastronómicos que aun hoy en día siguen como el Trigo Entero, el queso con tomate, las Frioleras o los Higos secos fritos que sobre todo se comían en la noche del “Reventón” el martes de Carnaval principalmente.
Hace 165 años un grupo de amigos se propuso poner en marcha este cuerpo de Armaos, el primer año sin demasiada consistencia, pero poco a poco fueron cobrando protagonismo en la Hermandad y por ende en la Semana Santa. Ya en el año 1851 participaron en la Bajada del Cristo y la Romería al Monasterio de Santa Ana. Como otra fecha importante hay que fijarse en el año 1875 participaron en la procesión de Las Palmas.
El Caracol y su significado, El Prendimiento, el Lavatorio de los pies, celebrado desde 1850, o el “Velatorio del Santísimo”, que se hizo 1848 por primera vez, con las guardias que realizaba un cuerpo de Guardia durante 48 horas seguidas, desde el Jueves Santo, hasta el Sábado de Gloria, fueron algunas de las cuestiones y vivencias repasadas por el conferenciante.
Fuente: http://www.elecodejumilla.es/
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