LAS RECLAMACIONES DE LOS CRONISTAS Y EL CONSISTORIO SURTEN EFECTO – LAS OBRAS EMPEZARÁN EN OTOÑO CON APOYO DE LA DIPUTACIÓN
La ermita de Barraix en Estivella se recuperará después de años de abandono y de un asalto que movilizó al cronista oficial de la localidad, Lluís Mesa y al resto de sus compañeros en la comarca para evitar que el edificio fuera pasto de la ruina.
Estas voces críticas, que reclamaron en distintas administraciones e instituciones una urgente actuación en el inmueble, por fin, han sido oídas.
La Diputación de Valencia ha confirmado su voluntad de intervenir en este inmueble, datado en 1922, abriendo el plazo hasta el próximo 3 de agosto, para que concurran empresas interesadas en la restauración de esta ermita
El ente provincial, propietario del inmueble, ha sacado a licitación esta actuación por un valor de 90.889 euros más IVA, unas obras cuya ejecución están previstas en seis meses.
Respecto al inicio de los trabajos, dependerá de los trámites de adjudicación, aunque todo apunta a finales de octubre o principios de noviembre, por lo que la ermita lucirá un nuevo aspecto bien entrada la primavera. La restauración de este entrañable templo para los vecinos de Estivella consistirá, según los técnicos de la diputación, en reparar los paramentos externos, sustituir la cubierta, uno de las zonas más dañadas del edificio dado los materiales utilizados y el paso del tiempo y acondicionar el interior del templo y los accesos. Sin duda, una de las prioridades del proyecto es el tejado, que presenta fisuras de importancia, además de la puerta de entrada que fue objeto de actos vandálicos, que acabaron con ella en el suelo. También carece de buena parte de su instalación eléctrica ya que robaron el cableado.
Las paredes exteriores serán reparadas y lucidas mientras se recuperará la decoración interior de la ermita. En cuanto a los accesos, el cronista oficial de Estivella recordaba que se adoptó el compromiso de intervenir en la senda que lleva hasta el inmueble, demasiado estrecha e inundable. Todo, con el objetivo es facilitar la visita y el acceso de los vecinos y visitantes a este emblema patrimonial. La insistencia del Ayuntamiento de Estivella en la necesidad de una intervención también ha sido determinante, una petición que realizaba la anterior corporación, que acompañó en su visita a la ermita de Barraix, el pasado junio de 2012, a la vicepresidenta de la diputación de aquel entones, Carlota Navarro, en la que estuvo presente la alcaldesa, María Jesús Ramón (PP) y el concejal de Urbanismo en la pasada legislatura, Salvador Mateu (PP). Más allá del interés artístico, el edificio tiene una gran significación a nivel simbólico y sentimental, ya que fue construido al abrigo de la Fonda de Barraix que disfrutaban familias adineradas de la época.
Fuente: http://www.levante-emv.com/ – Marian Romero
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