HISTORIAS DE BETANZOS CON MUCHA MIGA

EL CRONISTA PUBLICA UN LIBRO CON LA HISTORIA DE LAS TAHONAS DE LA CIUDAD QUE AÚN CONSERVAN HORNOS DE LEÑA Y PIEDRA

La panadería Rabizas, una de las más antiguas de Betanzos.

La panadería Rabizas, una de las más antiguas de Betanzos.

Carmiña, de la panadería Moar, en su antiguo horno de leña en el casco histórico.

Carmiña, de la panadería Moar, en su antiguo horno de leña en el casco histórico.

El callejero de Betanzos atestigua la importancia de un oficio que huele a trigo del país y que esconde en la masa su principal secreto. El callejón del Horno o la Rúa do Forno son algunos de los rincones de la Ciudad de los Caballeros que dan cuenta de la profusión de tahonas que albergó Betanzos, algunas de ellas aún en activo tras superar numerosos avatares.

El cronista oficial de la ciudad, José Raimundo Núñez-Varela y Lendoiro, ha publicado un libro que repasa la historia de un oficio que arraigó con fuerza en Betanzos y en el que relata con todo lujo de detalles el devenir de los antiguos hornos de piedra de leña construidos a base de piedra de cantería. Algunos de ellos, como la panadería Moar, -la de Joseíño-, Rabizas o el horno de Santa María aún en activo en la actualidad.

Hornos con más de cuatro siglos a sus espaldas, reconstruidos y reformados, considerados más antiguos de España en activo de los de sus características. Sus dueñps conservan el quehacer tradicional, pero sin dejar de innovar. Pan de mollete, rosca, broa, barra, anacos conviven con modernas chapatas de origen italiano, empanadas y más empanadas. Carmiña regenta el horno de Moar, un bajo escondido en el casco histórico, sin apenas letreros, frente al que han hecho cola generaciones y generaciones de betanceiros y vecinos de toda la comarca por sus roscas, bollas, barras, bollos y empanadas. Está considerada la panadería más antigua de Betanzos. Es, como la de Rabizas o Santa María, lugar de parada obligada a mediodía. El cronista repasa su historia y escarba en un oficio que protagonizó sublevaciones históricas en Betanzos, suministró a ejércitos y a la Armada Invencible y sobrevivió a los incendios que asolaron la ciudad. Historias para todos los gustos y con mucha miga.

Fuente: http://www.laopinioncoruna.es/ – Antares Pérez

Sin Comentarios.

Responder

Mensaje