LAS CRUCES DEL TÉRMINO DE BROZAS

POR FRANCISCO RIVERO, CRONISTA OFICIAL DE LAS BROZAS (CÁCERES)

Cruz de Santa Lucia, una de las cruces de las Brozas.

Cruz de Santa Lucia, una de las cruces de las Brozas.

Puesto al habla con don Gregorio Carrasco Montero, que fuera párroco de la iglesia de Santa María la Mayor de Brozas durante 33 años, me confirmó que la cruz que está debajo de la torre del reloj del templo procede de la ermita de San Antón, que fue trasladada allí porque entorpecía el movimiento de los tractores por esa vía de salida y así adecentaba un rincón exterior del templo que sólo servía para que los muchachos jugaran en él. El vástago de la cruz es original, pero la cruz es de otro monumento, ya que el original estaba en peores condiciones que la que se le puso.

En cuanto a las cruces que van desde el convento de Nuestra Señora de la Luz (hotel Convento de la Luz) por la parte oeste del pueblo era un Vía Crucis puesto por los hermanos franciscanos y que concluía en la cruz del Paseo de los Santos Abdón y Senén, que se halla a la entrada del pueblo procedente de Cáceres.

El cura conoció en su día tres cruces más que iban desde la ermita del Buen Jesús, La Soledad (que aún existe y donde nos tomamos la fotografía) por los huertos de esa zona, adosadas a sus paredes había, como digo tres más, derruidas en su día por los trabajadores italianos que durante la construcción del Pantano de Alcántara visitaban los pueblos de alrededor y los días de borrachera se dedicaron a estropear buena parte de estos singulares monumentos.

Se conserva la Cruz de San Juan y la del Paseo de los Santos, así como alguna otra por alguna finca del extenso término municipal.

En cuanto a la Cruz de Malpartida de Cáceres, situada sobre una peña, y que da nombre al hotel, se trata de lo que el Papa León XIII denominó Cruz del Siglo, que se pusieron por diversos lugares de la cristiandad para el cambio del siglo XIX al XX. Otra cruz a reseñar es la de Villamiel, que fue tallada en piedra, también Cruz del Siglo, por el abuelo de don Gregorio Carrasco Montero, quien es canónigo de la con-catedral de Santa María de Cáceres y director de la residencia sacerdotal, de la calle Clavellina de la capital cacereña.

Fuente: http://cronistadelasbrozas.blogspot.com.es/

Sin Comentarios.

Responder

Mensaje